BAGNKOK. La universitaria india cuya violación desató una ola de protestas en la India murió ayer por la madrugada en el hospital de Singapur en el que estaba ingresada. "La paciente falleció en paz a las 04.45 de la mañana", señaló el centro hospitalario en un comunicado mediante el que también apuntó que su familia estuvo a su lado.

Cuando la joven murió se encontraban también en el hospital Mount Elizabeth varios diplomáticos de la embajada de la India en Singapur, que tras el óbito empezaron a preparar el traslado del cadáver a Nueva Delhi. El embajador indio, T.C.A. Raghavan, explicó a la prensa que el cadáver de la víctima, cuya identidad no ha sido revelada, llegará a Nueva Delhi a bordo de un avión especial fletado por el Gobierno.

Los seis implicados en la agresión sexual, incluido el conductor del autobús en el que viajaba la fallecida, fueron detenidos y comparecerán ante la Justicia el 3 de enero, después de que la presión popular obligara a las autoridades a agilizar el proceso.