Vitoria. Cuando la ciudad aún no se ha recuperado de los dos episodios de desapariciones acaecidos en las últimas semanas -uno de ellos acabó en desgracia al encontrarse el cadáver de la persona que se buscaba-, fuentes de la Ertzaintza consultadas por este diario informaron del sufrimiento que padece la familia de Santiago Cantera, un gasteiztarra que permanece desaparecido desde la mañana del pasado día 22. Al parecer, según ha podido conocer este rotativo, este varón, que hoy cumple 72 años, se encuentra en tratamiento para hacer frente a los embates de un trastorno bipolar, circunstancia que podría propiciar episodios de desorientación.

La desaparición se produjo en el entorno de la Catedral de Santa María, en pleno corazón del Casco Viejo gasteiztarra, hacia las 11.30 horas del pasado domingo, cuando Santiago participaba en la celebración de una comunión. En ese lugar y a esa hora se le perdió la pista y fue cuando la familia inició la búsqueda. Se le intentó encontrar por los alrededores, donde al desaparecido le gustaba pasear. También se probó fortuna en su domicilio, aunque no hubo suerte. Por eso, y dadas las circunstancias, se ruega a toda persona que pueda aportar pistas sobre el paradero de este varón que se ponga en contacto con la Ertzaintza en la capital alavesa. Y cuanto antes, mejor. No en vano, se sospecha que Santiago se encontraría en la actualidad sin la medicación que necesita.

Otros casos Esta desaparición se une a otras de similares características vividas en Vitoria en las últimas semanas. Sin ir más lejos, el pasado día 20 se encontró el cadáver de Julián Lopo Molino, el hombre de 76 años desaparecido desde el día 18 en Vitoria. Fue la propia familia la que encontró el cuerpo sin vida del varón en una zona de acequias ubicada entre la autopista AP-8 y la autovía N-240, cerca de la salida número diez de esta carretera.

Más suerte tuvo María Encarnación González de Lopidana, la mujer de 86 años y vecina del barrio de Zaramaga, que fue encontrada el 9 de junio en buen estado en la zona de Gamarra. Según informaron desde la Policía Local, una ambulancia atendió a María Encarnación, después de haber pasado varios días sin haber ingerido alimentos.