Vitoria. Tocaba mojarse por la esclerosis múltiple y Álava respondió. Desde primera hora de la mañana, muchos ciudadanos empaquetaron el traje de baño, las chanclas y la toalla, y se dirigieron a la piscina más cercana para cubrir unos cuantos largos por una buena causa: combatir esta rara y desconocida enfermedad que cada vez afecta a más personas.

Desde la Fundación Estadio, la presidenta de la Asociación de Esclerosis Múltiple de Álava (AEMAR), Jaione López, coordinaba las actividades de una jornada que se ramificaba a lo largo de todo el territorio. "El año pasado en Euskadi participaron unas 88.000 personas en la iniciativa y este año esperamos tener buena respuesta en Álava. Estamos en Garaio, Agurain, Dulantzi, Artziniega, Amurrio... En Vitoria estamos en el Estadio, Mendizorroza y Gamarra. Si conseguimos llegar a involucrar a 1.500 personas, va a ser un bombazo", explicaba la presidenta mientras los primeros ciudadanos se animaban a sumar unos cuantos largos en su cuenta solidaria.

Cada cual nadó lo que quiso o lo que pudo. Desde la mañana hasta más o menos las 20.00 horas. Todos los participantes obtuvieron su diploma acreditativo y, entre todos, lograron sumar voluntades para tratar de sensibilizar e informar a la sociedad sobre la problemática que presenta la enfermedad, neurológica e incurable, y financiar los servicios de rehabilitación para quienes la padecen.

El tiempo acompañó "y eso que no hemos llevado huevos a las Clarisas", y a los participantes no les supuso molestia alguna desembarazarse de las camisetas y nadar unos cuantos metros. "La gente está muy animada y eso nos ayuda mucho. El club de natación de Judizmendi nadará en Mendizorroza y desde aquí les agradecemos enormemente que se hayan apuntado", señalaba López. La de ayer fue la XV edición de una campaña que, en el caso alavés, se desarrolla en piscinas y, a falta de playa, pantanos. En cada uno de los recintos de participación se acotó una zona y los bañistas cubrieron sus itinerarios dentro de ella. Posteriormente se sumaron los metros conseguidos y a lo largo del día de hoy se dará a conocer la cifra resultante. Sea cual sea ésta, la solidaridad habrá sido la ganadora indiscutible.

En el caso de la Fundación Estadio, como en otros muchos puntos de la geografía alavesa, se habilitó una carpa en la que se vendían divertidas camisetas de vivos colores con estampados de la firma Kukuxumuxu y productos de merchandising en apoyo a los enfermos. Las ventas, tal y como señalaban las responsables de AEMAR, estaban yendo "muy bien". "En Araia ya podemos decir que la respuesta ha sido magnífica porque la venta de camisetas ha resultado espectacular y nos hemos quedado casi sin género. ¡Hemos tenido que mandar más esta mañana!", se congratulaba la responsable de la asociación.

Ponerse en la piel de los más de 2.000 afectados en Euskadi resulta complicado, pero muchos trataron ayer de acercarse a ellos y conocer de primera mano los efectos de una enfermedad que no sólo deteriora la calidad de vida del enfermo, sino también la de su entorno familiar.