Vitoria. Cada vez que empiezan las clases en la universidad resulta frecuente escuchar comentarios tipo "no vienen maduros", "no comprenden lo que leen" o "cada año vienen peor preparados". El profesorado no parece del todo satisfecho con el perfil de los alumnos nuevos, poniendo así en evidencia la brecha que a su juicio existe entre el instituto y la facultad.
Para evitar caer en tópicos y cuantificar esta diferencia la Escuela Universitaria de Empresariales de Vitoria lleva varios años analizando a los estudiantes de primer curso. Nada más entrar en la facultad son preguntados por cuestiones de diferente naturaleza, como historia, ortografía y también, por supuesto, por materias relacionadas con la carrera que están a punto de comenzar. Después de tres cursos recogiendo resultados ya se puedan extraer algunas conclusiones.
La primera de ellas y las más importante es que, como se temía, la brecha sí existe. El perfil de ingreso real del alumnado nuevo está distanciado del perfil ideal definido por el profesorado. Los docentes consideran que los jóvenes deberían iniciar sus estudios universitarios "con una mayor destreza" para evitar problemas y seguir con el temario previsto.
Pero, ¿cuáles son las áreas más deficitarias? En el apartado de Matemáticas y Economía -dos de los cinco bloques en los que se divide el cuestionario- las preguntas relacionadas con la Bolsa son las que peores resultados logran. En concreto, en este apartado los alumnos obtienen una puntuación media de 2,9 sobre 10. Tampoco en otras cuestiones de actualidad económica como el Euribor andan demasiado finos. Por el contrario, los estudiantes no presentan ningún problema ante ejercicios consistentes en despejar la incógnita así como en los de álgebra. En el resto de las áreas -ecuaciones de segundo grado, cálculo, determinante, fracciones, tanto por ciento...- la nota media se sitúa en un bien. Cabe destacar, además, que en prácticamente todos los ejercicios se detecta un leve empeoramiento respecto a los resultados obtenidos de media en 2010.
Respecto al resto de los bloques en los que se divide el cuestionario preparado por la Escuela de Empresariales las notas son algo más bajas, especialmente en inglés. Por primera vez este curso se ha evaluado su nivel de lengua extranjera y no logran el aprobado. A los alumnos les cuesta manejarse todavía en este idioma, un aspecto que preocupa especialmente a la Universidad, que tiende hacia la internacionalización con el recién implantado Plan Bolonia.
Los profesores de Empresariales también han querido comprobar cómo escriben los alumnos y si a estas alturas siguen cometiendo faltas de ortografía. Es un asunto que levanta ampollas. Las últimas pruebas de Selectividad han dejado al descubierto algunas debilidades en este campo, debilidades que también se han visto reflejadas en este estudio. En el apartado de Ortografía y Léxico los estudiantes obtienen un aprobado raspado. En este sentido, cabe destacar que son mejores las notas que obtienen los que realizan la prueba en euskera que los que la realizan en castellano. Por el contrario, los de las aulas de castellano tienen un mayor conocimiento de Historia. El cuestionario también pone de relieve que los alumnos procedentes de colegios concertados obtienen en general mejores notas.
Así las cosas, los profesores de este centro gasteiztarra ponen el énfasis en los procesos de admisión del alumnado. Creen que se debería exigir un nivel mayor en determinadas áreas o disciplinas "para evitar así que la satisfacción percibida" por los estudiantes de primero "sea vea reducida al tener unas expectativas diferentes a la formación real exigida y ofertada".
Proximidad En el estudio llevado a cabo por la Escuela Universitaria de Empresariales y titulado Informe de ajuste de perfil de ingreso 2011, han participado un total de 113 alumnos. El cuestionario se consiguió pasar el primer día de clase y contaba con una batería de 23 preguntas, entre ellas, además de las citadas, otras destinadas a definir el perfil del alumnado en función de sexo, edad, tipo de educación secundaria cursada, modelo lingüístico elegido o motivos de la elección del centro.
Sobre esta última cuestión, cabe destacar que gran parte de los alumnos que eligen la facultad gasteiztarra para estudiar Empresariales lo hace por proximidad. Éste es el motivo que da el 72% de los jóvenes; sólo un 1,8% elige el centro por su programa formativo.