vitoria. A pesar de la situación económica que atraviesa el país, los comercios de Euskadi se esfuerzan en su apuesta por la modernización de sus puntos de venta tomando el camino de la calidad. Esto se ha visto reflejado en la alta participación que han tenido los negocios de la CAV en el programa de Modernización del Comercio Vasco auspiciado por el Ejecutivo autonómico. El mismo tiene asignada una dotación presupuestaria de 4,15 millones de euros, circunstancia que ha provocado hasta la fecha, una inversión inducida de 14,4 millones de euros.
Según el Gobierno Vasco, el ritmo de presentación de solicitudes está siendo muy ágil. No en vano, el Departamento de Industria, Innovación, Comercio y Turismo ha recibido 663 expedientes. De ellos, 48 tienen su origen en el sector comercial alavés. Del resto, 268 son de Gipuzkoa y 347 de Bizkaia. Curiosamente estas cifras se asemejan en número e inversión a los datos registrados en la misma fecha del pasado ejercicio. Entonces, un mes y medio antes, ya se habían registrado 665 expedientes y una inversión inducida de 14,9 millones de euros.
Tras el éxito del año pasado, el Ejecutivo ha decidido repetir su apuesta por la modernización de los comercios vascos al comprobar los resultados obtenidos. Este plan Renove se materializa en subvenciones a fondo perdido de entre el 15% y el 20% si se trata de inversiones en mobiliario, obra civil, equipamiento vario o rótulos, entre otros. Las ayudas también se conceden para mejoras en equipos informáticos, aplicaciones o sus complementos.
Las ayudas van destinadas a pymes con actividad comercial, entendiendo ésta por la puesta a disposición del mercado de productos o mercancías adquiridas con esa finalidad, sin modificación sustancial de las mismas. Asimismo la venta de bienes de consumo final realizada directamente por los productores, artesanos o industriales, entendiéndose por tales bienes aquellos no destinados a integrarse en procesos de producción, comercialización o prestación de servicios a terceros.
Las inversiones para ser subvencionadas tienen que ser superiores a 600 euros en el caso de equipamiento informático, o a 2.000 en el resto. Mientras la subvención máxima a obtener es de 12.000 euros por establecimientos. Es así como el año pasado el programa concluyó con 1.800 comercios ayudados, lo que supuso una inversión de 40 millones.
Pero este proceso de calidad no viene solo, va de la mano con la norma UNE que certifica una atención al cliente " muy buena". El Departamento tiene datos que indican que el ejercicio 2011 se cerrará con más de 2.000 comercios certificados. "Ésta es la antesala para seguir avanzando hacia la excelencia", indicó el Ejecutivo autonómico.