vitoria. No es la primera ocasión en la que un desafortunado accidente rompe la calma en Labastida y llena de dolor sus calles. El municipio ha vivido en otras ocasiones jornadas negras, como la acaecida en junio de 2008 cuando tres de sus vecinos fallecieron en accidente de tráfico cuando regresaban a la localidad, junto a quince personas más, después de haber asistido a la boda de uno de sus familiares en Zaragoza. Viajaban en un autobús alquilado, pero no pudieron completar su itinerario. Llovía, y un Audi A-6 que circulaba en sentido contrario al de su transporte patinó sobre el agua a la altura del término municipal de Figueruelas. Derrapó, superó la mediana, invadió el carril contrario y colisionó frontalmente contra el autobús, que acabó volcando. Eleuterio Rojas, de 70 años, y el matrimonio formado por Juan Carlos Pérez e Isabel Sáez, de 42 y 40 años, perdieron la vida. El Ayuntamiento de Labastida declaró tres días de luto. Las banderas de las edificios oficiales ondearon a media asta y durante aquellos tres días no se celebraron actos municipales.

Un año después, la consternación se instaló de nuevo en la localidad, que perdió a otro de sus vecinos en un siniestro de tráfico. El suceso tuvo lugar en el término de La Estación, en el municipio riojano de Fuenmayor. El accidente se produjo de madrugada, cuando la víctima, un hombre de 52 años, volvía a casa. Su vehículo se salió de la calzada y colisionó violentamente contra el pretil del puente del tren.

En mayo de 2011, un vecino de Logroño falleció en en el municipio también en un accidente de tráfico. Su Hyundai Sonata fue a chocar contra un tráiler articulado mientras ambos circulaban por la carretera N-124. La violencia del golpe le causó la muerte inmediata, mientras el piloto del camión tuvo que ser urgentemente evacuado a un hospital.