Vitoria. Osakidetza ofreció ayer explicaciones en el Parlamento Vasco sobre su controvertida decisión de compensar con incentivos a 125 altos cargos del ente público, un movimiento desvelado recientemente por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA que ha supuesto un gasto cercano al millón de euros a las arcas autonómicas. El director general del ente público, Julián Pérez Gil, defendió la necesidad de "reconocer" de esta forma a los directivos porque acceder a estos cargos les supone "una merma de ingresos en muchas ocasiones". Pérez Gil compareció junto al consejero vasco de Sanidad, Rafael Bengoa, a petición del parlamentario de EA, Juanjo Agirrezabala, que tildó de "incomprensble" el pago de primas "en un momento de recortes generalizados en las nóminas de los trabajadores de la Administración y en el propio Servicio Vasco de Salud".

Bengoa recordó que él también pidió una comparecencia para aclarar este tema ante la Comisión y detalló que a causa de la crisis ha habido menos fondos, "cuando había que hacer más porque cada vez hay más demanda del sistema". "Tenemos que tener un razonamiento de gestión muy agresivo y ambicioso", indicó. Por su parte, el director general de Osakidetza lamentó que la contratación de directivos que hayan desarrollado su carrera profesional en Osakidetza "resulta complicada" debido a la ya citada merma de ingresos, aunque a renglón seguido resaltó que la línea a seguir es "conseguir que gestionen Osakidetza personas con larga experiencia de trabajo en la red".

En este sentido, Pérez Gil detalló que los directivos son la única categoría profesional de Osakidetza que no cobra el concepto desarrollo profesional, de 8.400 a 17.600 euros anuales, cantidades que no perciben desde el año 2007. Pérez Gil apuntó también que en 2009, cuando al resto de trabajadores de Osakidetza se les aplicó un incremento salarial del 3% se acordó la congelación de salarios de los directivos, lo que se suma a los recortes que toda la plantilla sufrió en el año 2010.

Por todo ello, el director general de Osakidetza precisó que la mayor parte del personal directivo cobra entre 50.00 y 75.000 euros anuales y que sólo diez personas llegan a los 75.00 y 100.000 euros al año. "Por encima de los 100.000 euros por año se sitúan los salarios de 495 facultativos y ocho enfermeras", subrayó.

Pérez Gil zanjó que el actual Consejo de Administración de Osakidetza "comparte la necesidad de reconocer a los equipos directivos de las diferentes organizaciones de servicio su contribución a la consecución de objetivos y de compensar la merma que en sus retribuciones supone asumir responsabildades directivas y dejar los puestos que anteriormente ocupaban dentro de Osakidetza".