J. Fernández

Bilbao. Los temores, la incertidumbre, la desconfianza y muchas preguntas por resolver asaltan al colectivo de docentes de las haurreskolas. La promesa de la consejera de Educación, Isabel Celaá, de abonar la parte descontada de sus salarios ha sido celebrada por los más de mil quinientos educadores y educadoras. Sin embargo, emplazan a la máxima responsable del Departamento de Educación a que les explique cómo hará frente a este desembolso y a la demandada mejora de las condiciones laborales si no tiene previsto aumentar la partida presupuestaria.

Una duda más que razonable que, desde Lakua y desde el Consorcio Haurreskolak no han despejado en estas últimas semanas, y que ha empujado a los sindicatos LAB, STEE/EILAS y ELA a mantener sus movilizaciones de protesta ante la sospecha de nuevos recortes en la calidad del servicio ofrecido en los más de doscientos veinte centros en que son educados y asistidos más de seis mil pequeños de entre 0 y 3 años en el conjunto de Euskadi. La próxima, tal y como anunció ayer este periódico, será el paro parcial del día 7, de nueve a doce del mediodía.

Dudas razonables Y es que, según explicaron Arantza Arrieta (STEE/EILAS), Leire Garro (LAB) y Miren Zubizarreta (ELA) "tememos el contenido de las declaraciones de Isabel Celaá cuando se refieren a reorganización de los recursos propios. ¿Cómo va a gestionar el mismo servicio si no aumenta el presupuesto? Por desgracia, sabemos las respuestas: no se cubrirán las sustituciones, aumentará el ratio de niñas y niños, se harán menos contrataciones, menos recursos,?", enumeraban desde las centrales.

Es decir, a juicio de los profesionales de las haurreskolas, las palabras de la consejera no han servido para descifrar el silencio del Consorcio que gestiona esta red de centros educativos y asistenciales, cuyos responsables aún no se han reunido con los representantes de los trabajadores; todo lo contrario, denunciaban desde los sindicatos, ya que barruntan que la solución de reajustes propuesta por Celaá afectará por completo a su trabajo diario: menos tiempos para planificación, imposibilidad de acceder a materiales pedagógicos,?

Asimismo, quisieron recordar que no han vuelto a tener contacto ni con los responsables del Consorcio ni del Departamento desde que el pasado día 23 se les desconvocara de una reunión a la que habían sido llamados. "En ningún momento han demostrado voluntad de negociar", zanjaban.Con este escenario, educadoras y educadores de haurreskolas mantienen sus acciones de protesta ya que, según dijeron, "prevemos más recortes en el servicio público que ofrecemos. ¿Y para cuándo el reconocimiento de nuestro colectivo?".