sevilla. La Fiscalía y la acusación particular que ejercen los padres de la joven sevillana Marta del Castillo mantuvieron ayer los cargos contra el menor conocido como el Cuco, al que acusan de violarla y asesinarla para después deshacerse del cuerpo, hechos por los que las acusaciones piden seis años de internamiento en un centro cerrado seguidos de tres años de libertad vigilada, la máxima pena que prevé la Ley del Menor, mientras que la defensa solicitó la libre absolución.
La Audiencia Provincial de Sevilla acogió la duodécima jornada del juicio contra el menor, quien hizo uso de su última palabra para defender su inocencia y decir que, "después de las presiones que ha estado recibiendo durante tanto tiempo, de haber sabido dónde estaba el cuerpo lo hubiese dicho". "Ojalá pudiera decir dónde está, porque es mi amiga y yo también estoy sufriendo", agregó el menor, para a continuación asegurar que si se mostró "frío durante el juicio es porque estaba tranquilo".
La jornada comenzó con la intervención del equipo psicosocial que atendió al menor acusado y que analizó sus circunstancias familiares y personales, quien ratificó el informe realizado en su día y recomendó "las mismas medidas de internamiento, porque entiende que el menor no ha evolucionado".
Prosiguió la Fiscalía, que basó su acusación por los delitos de asesinato y agresión sexual en la declaración prestada el día 17 de marzo del 2009 por el asesino confeso, Miguel Carcaño, "la única" declaración en la que "relata de manera minuciosa y veraz" los hechos. En caso de que el juez "no considere que existan pruebas suficientes de la directa participación del menor en todos los hechos", la Fiscalía solicitó que se le condene por un delito de encubrimiento, pidiendo en este caso tres años de internamiento en centro cerrado.
De su lado, la abogada de la familia, Inmaculada Torres, ratificó los cargos contra el menor, relatando que Miguel y el Cuco estuvieron consumiendo cubatas y porros en el piso de León XIII y, en un momento dado, "se desencadenó la agresión a Marta".
Por último, el letrado del menor, Fernando de Pablo, dijo que "no le cuadran los horarios" y que hay "muchas contradicciones" en torno a los horarios que manejan las acusaciones para defender la participación de el Cuco en el crimen. "Si en el intervalo de tiempo que se dice le dio tiempo a tomarse tres cubatas, una pastilla, cometer dos violaciones, un asesinato, ir a su casa, cambiarse de ropa, volver e incorporarse a otro botellón, chapó, porque debería ir a las olimpiadas", ironizó.
El juez de Menores número 1, Alejandro Vián, dejó el juicio visto para sentencia, aunque dejó en suspenso el plazo para dictarla al objeto de analizar la cuestión de inconstitucionalidad planteada por la familia, que se interesó en la celebración de un único juicio en el que se juzgue tanto al menor como a los cuatro acusados mayores de edad.
De esta manera, tanto el letrado del menor como la Fiscalía tienen un plazo de diez días hábiles para pronunciarse sobre esta cuestión, y tras ello el juez contará con tres días para decidir si eleva la cuestión al Tribunal Constitucional (TC), por lo que el fallo quedaría pendiente sine die de la resolución del TC, o la rechaza, en cuyo caso procedería a dictar sentencia.
