vitoria. El uso del euskera en los hospitales y ambulatorios vascos como baremo para medir la satisfacción de los pacientes ha caído en el olvido para los nuevos gestores de la Sanidad pública vasca. Si en las primeras nueve encuestas elaboradas por Osakidetza existía un epígrafe exclusivo dedicado al empleo del idioma, en el último informe este apartado ha sido directamente eliminado para malestar de colectivos que trabajan en favor del uso del euskera en la organización como Osasungoa Euskalduntzeko Erakundea (OEE). Según denunció ayer Roberto Manjón, portavoz de este colectivo, "Osakidetza ha dado un nuevo paso en contra del uso del euskera, en la misma línea en que viene haciéndolo en la última legislatura". En concreto -prosiguió-, "separando la atención en la lengua del usuario de los parámetros que miden la calidad de los servicios".
La encuestas elaboradas por la empresa a la que Osakidetza confía este servicio estaban compuestas, por ejemplo, el pasado año 2009 por algo más de 50 preguntas alusivas al trato recibido por los profesionales, la calidad de la asistencia, la accesibilidad... y también acerca del idioma, como ésta: ¿Está usted más bien satisfecho o más bien insatisfecho con el uso que se hace del euskera en el centro de salud? No sólo en los cuestionarios alusivos a la atención primaria, sino también en los referidos a la asistencia hospitalaria en centros de agudos y de media y larga estancia. De un año para otro, la adecuada atención en el idioma parece haber dejado de ocupar la lista de prioridades de los máximos responsables de Osakidetza.
A juicio de Manjón, los primeros pasos en este sentido llegaron con una medida "clave", que supuso "vulnerar el decreto 67/2003 suprimiendo la valoración del uso del euskera de los contratos programa de las organizaciones de Osakidetza". Esta suerte de relación contractual entre pacientes y organizaciones recoge los objetivos que éstas se comprometen a cumplir cada ejercicio en relación a su cartera de servicios.
"Ahora da una vuelta de tuerca más y elimina la pregunta sobre el uso del euskera de las encuestas corporativas de satisfacción, a la vez que, en consecuencia, elimina la satisfacción de los ciudadanos con respecto al uso del euskera de los informes que en el área de calidad se elaboran sobre la satisfacción de pacientes y usuarios", censuró con dureza Manjón, que desarrolla su labor en el hospital vizcaíno de media y larga estancia ubicado en Gorliz.