vitoria. La reina de las drogas duras nunca ha desaparecido del todo del escenario alavés. Los agentes de la Policía Local de Vitoria informaron a finales de 2010 que, en lo que iba de año habían tramitado un total de 682 expedientes sancionadores por consumo o tenencia ilícita de drogas en espacios públicos. En concreto, se instruyeron 61 expedientes por cocaína, 27 por anfetamina, quince por combinaciones, siete por ketamina y tres por heroína. La educación sigue siendo clave para lograr que los jóvenes no vean en las drogas una vía de socialización y evitar que se reproduzca una situación que hace veinte años arrasó con toda una generación de jóvenes de la periferia de Vitoria. La epidemia de la heroína ha acabado por convertirse en un problema residual, aunque la escuela y los padres deben esforzarse para que no desaparezca la sensación de peligro y que los jóvenes sepan a qué se enfrentan.

últimas actuaciones Prueba de que la heroína sigue teniendo demanda en Vitoria es que el pasado julio la Policía Nacional desmanteló un piso del Casco Viejo de Gasteiz donde se traficaba con estupefacientes y detuvo a su ocupante con más de kilo y medio de speed oculto en una bandolera y otros 646 gramos escondidos en el congelador del domicilio. Asimismo, se incautaron siete cogollos de marihuana, un envoltorio con ocho gramos de heroína, 25 gramos de cocaína y 720 euros en efectivo. El golpe más duro al tráfico de heroína en la CAV llegó a principios de 2010 de la mano de la Policía Nacional cuando detuvo en Bilbao a seis personas dedicadas a introducir y distribuir cocaína y caballo en Euskadi y Cantabria. Cuando procedieron al registro de las propiedades de los integrantes de este grupo organizado, los agentes intervinieron más de 2.000 gramos de heroína, 600 gramos de cocaína, una pistola semiautomática con cinco cartuchos, dinero en metálico y un ordenador portátil.