vitoria. Un total de 1.200 estudiantes alaveses han renunciado este año al programa de préstamo de libros de texto que promueve el Gobierno Vasco en los centros educativos. Al parecer, las renuncias se deben a que muchas familias prefieren acogerse a las ayudas directas que concede anualmente la Diputación alavesa para afrontar la compra de los manuales escolares.

Denon Eskola, la federación que agrupa a las asociaciones de padres y madres de Álava, ha expresado su malestar por esta situación, convencida de que el plan de reutilización es el más adecuado tanto para las etapas de Primaria como de Secundaria. Por ello, el pasado lunes mantuvo una reunión con miembros del Departamento vasco de Educación para que este programa sea de obligado cumplimiento por todas las familias y centros.

En la actualidad, acogerse a las ayudas que concede Lakua o a las de la Diputación es voluntario. A diferencia de otros territorios, en Álava existe la posibilidad de que a los padres les den el dinero en mano para ir a la tienda y comprar los manuales directamente. Sin embargo, la existencia de dos vías ha originado grandes desigualdades, ya que los alumnos que se acogen a las ayudas forales tienen los libros en propiedad, mientras que el resto se ve obligado a cederlo el siguiente curso. "Ademas, los padres que se acogen al programa solidario estamos pagando el 50% de lo que cuesta el manual, entre el canon y lo que valen los cuadernillos", denuncia Santa González.

Por ello, exigen a Educación que amplíe el dinero que destina anualmente al programa de préstamo, para que sea completamente gratuito, y que además, establezca la obligatoriedad de acogerse a él.