PAMPLONA. El uso del microscopio fluorescente consigue extirpaciones completas de uno de los tumores cerebrales más agresivos en el 83% de los casos, según una investigación realizada por especialistas de la Clínica Universidad de Navarra.

En concreto, según ha precisado esta clínica en un comunicado, la utilización quirúrgica del microscopio de fluorescencia ha logrado una extirpación media del 99% del volumen tumoral de todos los glioblastomas operados, en una serie de 36 pacientes.

La extirpación se ha acompañado de un detallado estudio patológico de los casos que puede permitir conocer mejor esta difícil enfermedad.

En la investigación, cuyos resultados han sido publicados en la revista especializada internacional Journal of Neuro-Ongology, han participado los doctores Ricardo Díez Valle y Sonia Tejada, de Neurocirugía; Miguel Angel Idoate, de Anatomía Patológica; Reyes García de Eulate y Pablo Domínguez, de Radiología; Jaime Espinós, de Oncología Médica y Javier Aristu, de Oncología Radioterápica.

"El glioblastoma es un tumor que, desgraciadamente, no se cura sólo mediante la cirugía. Pero lo que sí sabemos es que su extirpación completa es el primer paso para que el tratamiento con quimioterapia y radioterapia sea más eficaz y se tolere mejor", ha explicado Díez Valle

De hecho, según ha apuntado, la experiencia clínica revela que "los pacientes con extirpaciones completas son los que presentan menos complicaciones en la radioterapia y los que obtienen mayor beneficio de la quimioterapia, por lo que ganan en mayor supervivencia y en mejor calidad de vida".

Del estudio realizado se concluye que el índice de extirpaciones visibles se sitúa en el 83% de los tumores, aunque en el cien por cien de los casos se consigue eliminar un volumen superior al 98%.

"Se ha comprobado que en pacientes en los que la extirpación no es completa, pero es próxima al cien por cien del tumor, la eficacia del tratamiento es prácticamente la misma que en los que se ha obtenido la eliminación total del tumor. Esto ocurre en los pacientes en los que se consigue resecar el 98 o el 99% de la masa tumoral", según el neurociruano.

Actualmente, la obtención de una extirpación quirúrgica casi completa de este tumor permite participar en un ensayo clínico a los pacientes diagnosticados de un glioblastoma.

El trabajo de investigación tiene el objetivo de probar la eficacia de vacunas celulares personalizadas contra este tumor cerebral, según la clínica, que ha indicado que se trata de un tratamiento de inmunoterapia consistente en la aplicación de un fármaco producido con células sanas y del tumor del propio paciente.

El ensayo, que continúa abierto y se aplicará en una muestra de 37 pacientes, está impulsado y desarrollado por las áreas de Neuro-Oncología y de Terapia Celular de la Clínica Universidad de Navarra, en colaboración con el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra, a través del Instituto Científico y Tecnológico (ICT) de esta institución.

La Clínica es actualmente el único hospital español que desarrolla una investigación de estas características.

La nueva terapia se administra a los pacientes, combinada con el tratamiento convencional consistente en la extirpación quirúrgica del tumor seguida de la administración de radioterapia y quimioterapia con temozolomida.

Los pacientes candidatos deben cumplir con el requisito de estar recién diagnosticados de la enfermedad o de tener sospecha de sufrirla. Asimismo es indispensable que no hayan sido sometidos con anterioridad a ningún tipo de tratamiento contra el glioblastoma.