MADRID. La vacuna de la próxima campaña contra la gripe será trivalente, ya que inmunizará tanto contra la de tipo A como contra las dos cepas de la estacional que más hayan circulado durante el invierno del hemisferio sur, han explicado fuentes del Ministerio de Sanidad.

Por fecha de caducidad, aún podrían aprovecharse las sobrantes de la gripe A adquiridas el año pasado, al menos algunas, pero no tiene sentido una doble vacunación cuando habrá disponible una única dosis que prevenga ambas simultáneamente, dicen las fuentes.

Así, casi con toda probabilidad, según las mismas fuentes, los excedentes de vacunas de gripe A no gastadas se devolverán a los laboratorios fabricantes para que las destruyan de forma controlada.

Esto es lo que sucede año tras año con las de la gripe estacional, pues no sirven para la campaña siguiente.

Cada temporada se prepara una nueva vacuna con las dos cepas estacionales más corrientes del invierno anterior, que en esta ocasión incluirá también la de la gripe A.

Las fuentes matizan que todavía no es definitivo el procedimiento para los excedentes de la vacuna de gripe A, pues esto se acordará con las comunidades autónomas, que son las propietarias de las vacunas.

Sanidad, a petición de las CCAA, colabora en la recogida coordinada de las vacunas sobrantes a través de los almacenes de distribución farmacéutica mayorista, que es donde se están depositando.

Las fuentes indican que el Ministerio no está contabilizando las que se recogen porque es una cuestión entre las comunidades autónomas y los almacenes, y además sería difícil saberlo antes de que concluya el proceso.

Sanidad, insisten, ha acordado con los almacenes que colaboren en la recogida y depósito de las vacunas hasta que, probablemente, se entreguen a los laboratorios. Si hay sobrantes en farmacias y hospitales, las CCAA se encargan de enviarlas a esos almacenes.

Las fuentes apuntan a la posibilidad de que la solución definitiva para los excedentes se decida cuando se planifique la próxima campaña antigripal (otoño-invierno).

Han añadido que la devolución a los fabricantes y su destrucción no tiene coste para las administraciones, que ya pagaron todas las dosis, tanto las gastadas como las sobrantes.

Para hacer frente a la pandemia España adquirió 13,5 millones de dosis, aunque sólo se han utilizado unos tres millones; el Gobierno anunció que se donarían cuatro millones a la Organización Panaméricana de la Salud.