agurain. El Araba Euskaraz surgió el año 1981 como la fiesta de las ikastolas de Álava y la preparación de una fiesta de estas características implica la implicación de un gran número de persona. Y en Agurain lo saben bien. Los padres de los alumnos de Lautada Ikastola se han volcado para que mañana todo salga a pedir de boca.

"Hemos hecho una buena piña para llevar a cabo todos los preparativos", señala Iñigo Egurrola, padre y miembro colaborador del Araba Euskaraz de Agurain. Si bien es consciente de que "toda colaboración es poca".

"A lo largo del año nos hemos tenido que mover mucho para que todo esto salga bien", reconocía una madre a la puerta del centro escolar ubicado en el barrio de San Jorge.

"Con ello queremos mostrar nuestro apoyo a la lengua vasca y apostar por una educación de calidad para nuestros hijos", relata Juan, padre de dos pequeñas rubias.

"A mi entender, el Araba Euskaraz supone la reivindicación del euskara y de la cultura vasca en Agurain", señala Mari Carmen López frente al centro recientemente pintado de vivos colores. Mañana tendrá lugar la treinta edición y en ella habrá un importante grupo de vecinos, padres, madres, alumnos y profesores de Lautada Ikastola deseosos de atender a los cientos de personas que se desplazarán en coche, tren o en autobús hasta la capital de la Llanada.

"Los grupos de trabajo ya están más o menos completos, pero desde aquí hacemos un llamamiento a la colaboración porque todas las manos son pocas", reconoce Egurrola, quien a lo largo de los últimos meses ha encontrado "pocas trabas" a la hora de poner en marcha un proyecto festivo de esta envergadura. Sobre todo, porque "hemos contado en todo momento con la colaboración de la comisión del Araba Euskaraz encabezada por Buka".

una hora de recorrido Ésta es la segunda ocasión que la fiesta de las ikastolas alavesas se celebra en Salvatierra. La primera vez tuvo lugar en 1985. Entonces, la cita la organizó la ikastola Lope de Larrea, que posteriormente entró en la red pública.

A diferencia de aquella vez, el recorrido no será por el interior del Casco Viejo, sino por la villa extramuros. El itinerario, que se despliega a lo largo de tres kilómetros, comenzará en la calle Fueros, a la entrada del casco urbano. "Se trata de un recorrido prácticamente llano que puede realizarse, a un paso tranquilo y parándose en los distintos puestos, en poco más de una hora", reconoce un padre.

"Habrá opciones para todos los gustos con el objetivo de sacar a la calle el euskera y para recaudar dinero para las instalaciones del centro".

La recaudación económica servirá para poder dar una nueva imagen a un centro recientemente adquirido a la congregación religiosa de las Hermanas de la Providencia. "Nuestra valoración como padres de este primer año es muy buena. Reconocemos que ha sido un año difícil, pero con el que estamos cumpliendo nuestras expectativas", apunta Iñigo Egurrola.