El lehendakari, Patxi López, aseguró hoy, en el primer pleno del que se desarrolla bajo su mandato, que su gobierno desarrollará una política lingüística destinada a "corregir la asimetría" del euskera respecto al castellano, aunque siempre desde "el equilibrio, el respeto a la pluralidad y sin marginaciones".
La reunión del Consejo Asesor del Euskera, un órgano para el estudio y coordinación de las políticas de normalización lingüística, estuvo precedida por la aprobación ayer en el Parlamento vasco de una iniciativa del PSE-EE y PP que reclama la eliminación de las sanciones a las empresas que no rotulen y atiendan en euskera, que en algunos casos llegaban a los 600.000 euros.
López, en su discurso de hoy, subrayó la necesidad de revisar el Plan general de Promoción del Uso del Euskera e impulsar el documento 'Euskera 21', desarrollado por el propio Consejo Asesor en la pasada legislatura, que defiende una política de impulso de esta lengua basada en el consenso y en la progresividad.
El lehendakari manifestó que ambas iniciativas son "herramientas de enorme importancia". En el caso del Plan de Promoción del Euskera, especialmente, indicó que es necesario "actualizar las formas" de fomentar el uso de la lengua vasca.
Esta tarea, según explicó, "no corresponde sólo al Gobierno", sino que también es responsabilidad del "conjunto de la sociedad", dado que son los propios ciudadanos quienes, "en última instancia, tienen en su mano promocionar y practicar el euskera y hacer de ella una lengua también profesional, no sólo coloquial".
"Tenemos que desarrollar una política de euskera adecuada a los retos del siglo XXI, que son los retos de una sociedad moderna, plural, solidaria y democrática", añadió. Por ese motivo, anunció que su Gobierno "va a mantener, como hasta, ahora una política de impulso activo del euskera; va a reconocer y desarrollar los derechos de los hablantes del euskera y va a corregir la asimetría hoy existente respecto al castellano".
Todo ello, no obstante, se hará "de una forma equilibrada y sin marginaciones, partiendo del espeto a la pluralidad y los derechos lingüísticos de todos y cada uno de nuestros ciudadanos, y avanzando hacia el ideal de una sociedad bilingüe, trilingüe si podemos".
El objetivo, en opinión de López, es avanzar hacia una sociedad "orgullosa de su cultura y abierta al mundo; acogedora con todos los que llegan y van a seguir llegando para asentarse en Euskadi, que serán tan vascos como los demás".