salinas de añana. Tras un largo parón para construir el centro de interpretación del Valle Salado, ayer se anunció en Salinas de Añana el próximo comienzo de las obras, que podría ser en junio, para restaurar 300 eras, en las que se pretende volver a producir sal de "extraordinaria calidad" y, además, valorizar el lugar como un importante atractivo turístico y medioambiental.

La iniciativa es posible gracias al convenio entre Ura, Agencia vasca del Agua, y la Fundación Valle Salado, por el que la primera aportará 2,7 millones de euros a lo largo de tres años, para realizar esa transformación de las viejas salinas.

En el acto de la firma estuvieron presentes la consejera de Medio Ambiente, Pilar Unzalu; el director de URA, Iñaki Urrizalqui, y la diputada de Cultura, Lorena López de Lacalle. Unzalu afirmó que la dotación económica del convenio supone la aportación de mayor entidad que se realiza hasta la fecha dentro del proceso de recuperación integral del Valle Salado de Salinas de Añana. Se gastarán 900.000 euros por año (2009, 2010 y 2011).

Por su parte, el director de Ura aseguró que se trata de financiar una serie de obras tendentes a la recuperación del extremo sur del valle, donde se encuentran integrados todos los manantiales hipersalinos existentes.

humedal artificial Además, Urrizalqui matizó que el Valle Salado entra de lleno en las competencias de Ura, "no sólo por tratarse de un humedal artificial único en sus características, sino en tanto en cuanto está dentro de los humedales Ramsar, de importancia internacional desde 2002.

Por su parte, López de Lacalle indicó que la fundación se compromete a redactar los proyectos de obra, obtener los terrenos, las licencias y contratar y dirigir las obras. Una vez recepcionados los trabajos, la fundación se compromete a poner las eras ya restauradas en explotación y a conservarlas debidamente.

Además de atraer a un mayor número de visitantes, fruto de estos trabajos que comenzarán en junio, se van a poner a disposición de la producción de sal artesanal un buen número de eras, que permitirán ir aumentando progresivamente la producción de sal y posibilitar su afianzamiento en el mercado de la alta gastronomía.

Los interesados en visitar las espectaculares salinas podrán acercarse hasta el 12 de octubre, tiempo durante el que también estará abierto el pediluvio.