MADRID. El presidente de la Asociación Española de Escoltas (ASES), Vicente de la Cruz, alertó ayer de que las mafias de piratas que operan en el Océano Índico están reaccionando a la protección de la que se vienen sirviendo desde hace meses los pesqueros adquiriendo en el mercado negro ametralladoras pesadas procedentes de la extinta Unión Soviética que les permitirían atacar a dos kilómetros de distancia.

De la Cruz, aseguró que existe información de la adquisición de este tipo específico de armamento, concretamente, del tipo KPV 14"5, fácilmente accesibles en el mercado negro de la propia Somalia o de las repúblicas islámicas que en el pasado estuvieron bajo dominio de la ya extinguida URSS. De este modo, los piratas podrían derribar un barco a gran distancia sin necesidad de arriesgarse acercándose a las embarcaciones pesqueras que ahora faenan con agentes de seguridad privada a bordo que tan sólo están equipados con armamento ligero, añadió De la Cruz. Desde ASES enmarcan esta nueva estrategia en la nula voluntad de las mafias piratas de cesar su actividad a pesar de los mecanismos de defensa aplicados por los distintos países occidentales. "Sin ninguna duda van a seguir con el negocio", aseguró De la Cruz, quien apuntó a que la situación entrará en una fase más violenta que la actual y abogó por que los estados europeos tomen medidas. En este sentido, explicó que en las últimas semanas se han intensificado las negociaciones con las autoridades de las Seychelles para que permitan a los barcos que pescan en la zona equiparse con armamento similar al adquirido por los piratas más allá de las armas ligeras usadas hasta ahora.