A L mal tiempo, buena cara. Ni la crisis ni el temido mal tiempo del norte peninsular propio del mes de abril, el de las aguas mil, han retraído a los turistas que han decidido acercarse a la capital alavesa durante esta Semana Santa. La ocupación hotelera ha superado a la del año pasado y se espera que crezca aún más mediante las reservas de última hora, ya que esta es la moda imperante: cada vez son más los rezagados que se apuntan en el último momento arrepentidos de quedarse en casa en sus vacaciones.
Si bien los agroturismos son los únicos que pueden colgar el cartel de no hay vacantes, los hoteles de toda la vida no consideran a las casas rurales como competencia propia, ya que sus clientes no buscan el contacto con la naturaleza. Aun así, los centros hoteleros han creado estrategias nuevas con el fin de atraer a más clientes. Prueba de ello son la bajada de tarifas, promociones como 3x2 noches o paquetes turísticos.
De esta forma incentiva el turismo el Ciudad de Vitoria, quien entre sus promociones tiene el pack de 3x2 noches, descuentos en los precios por habitación entre cinco y seis euros respecto al año pasado, recorridos de pintxos por Vitoria o visitas a la Catedral de Santa María. Unas iniciativas que le han otorgado un 60% de ocupación media para estas fiestas, si bien la cifra se disparará entre hoy y mañana, ya que son los días fuertes de la Semana Santa. "No somos la competencia de las casas rurales porque nuestro punto fuerte es nuestro emplazamiento dentro de Vitoria, como capital turística", explican en este centro.
Anabel de la Fuente, gerente del Gran Hotel Lakua, asegura que en su caso la ocupación es mejor que la de 2009. "Estamos al 70%, salvo los dos últimos días (domingo y lunes), tal vez se deba a que ha hecho un invierno duro y la gente tiene ganas de salir", comenta la responsable. Esta Semana Santa también han aumentando las reservas de última hora. "Es la tendencia de este año de toda esa gente a la que le da pena quedarse en su casa". Lo mismo aseguran en Gobeo Park, donde rondan el 75% de ocupación.
Este hotel será otro de los que ofertará escapadas a sus huéspedes. "Además del recorrido de pintxos y visitas a la Catedral tenemos una cena temática con maridaje". Las familias procedentes, en su mayoría, de Cataluña y Madrid serán el prototipo de clientes que podrán disfrutar de estas propuestas.
El Barceló es otro de los alojamientos de la capital que también ha bajado las tarifas y que le ha dado un resultado positivo. "Hasta el sábado estamos al 90%".
Mientras que el Boulevard mantiene los mismos precios. Este año ofrece como ventaja el descuento por venta anticipada. Pero se trata de la única estrategia. "Nuestros rivales no son los agroturismos porque nuestra baza es la cercanía, que no tengan que desplazarse. A ellos, en su ocupación les influye más el tiempo, que no suele ser bueno en esta época del año".
El hotel Dato está "al igual que el año pasado" con un 100% de ocupación y sin promociones de por medio. "Estamos en el centro de la ciudad, ése es nuestro punto fuerte", zanjan desde el establecimiento.
Agroturismos El Hotel Villa de Laguardia, centro temático del vino, detalla que para ayer y hoy tiene todas las habitaciones vendidas, aunque para mañana se repite esta situación optimista, ya que "sólo queda un cuarto libre". Un rotundo éxito respecto al año pasado. "Nos va mucho mejor desde que a finales de la Semana Santa pasada abrimos el spa". Unos días de relajación de los que podrán disfrutar tanto familias como jubilados -su perfil de cliente- por unos 120 euros la noche.
En el caserío Behitegi, a cinco kilómetros de Vitoria, también cuelgan el cartel de completo para estas fiestas. El entorno agreste y la cercanía son sus puntos fuertes. "Principalmente vienen familias con niños, que se quedan cinco días y cuatro noches", afirman desde esta antigua vaquería reconvertida en casa rural hace tres años, que sale a 68 euros la noche, con desayuno incluido. "Se buscan la vida ellos solos, así que no tenemos tácticas especiales". Sin plazas libres también está la casa rural Sagasti Zahar, a 12 kilómetros de la capital, en el parque Garaio. Sus alicientes son la ruta verde de Ullibarri-Gamboa. "Para la semana de Pascua está peor porque estamos al 40%", señalan.
Un panorama que se repite desde hace años tanto para el turismo rural como para el urbano. Los matrimonios jóvenes con niños también optan por los camping, como el de Angosto, donde están al 100%y pueden reservar bungalós para cuatro plazas por 92,8 euros la noche o por 111,7, si acuden seis personas. Al de Ibaya -en la carretera 102-Zuazo de Vitoria- acuden, sobre todo, cuadrillas, que ayer eran de irlandeses, ingleses y catalanes. "Estamos al 70%. El terreno por una noche cuesta cuatro euros y, si además de la caravana se trae el coche, el precio es el doble".