vitoria. Una vez conocidos los datos oficiales de la prematrícula, que confirman el estancamiento del modelo A, la polémica entre PSE y PP está servida. El socio preferente del Gobierno Vasco insiste en que la "foto" que se extrae una vez finalizado el proceso no es real, mientras que el Departamento de Educación asegura que las familias "han ejercido plenamente su libertad lingüística".

Desde que el área que dirige Isabel Celaá presentara un nuevo sistema de matriculación que, según la consejera, iba a permitir conocer con mayor exactitud la voluntad de los padres a la hora de matricular a sus hijos en uno u otro modelo lingüístico, no han cesado las críticas por parte del PP y de la plataforma por la Libertad de Elección Lingüística, partidarios ambos de impulsar el modelo A. Insistían en que las familias vascas no habían recibido suficiente información sobre esta nueva fórmula, por lo que su decisión final iba a seguir estando condicionada.

Los datos de la prematrícula para el curso académico 2010-2011 conocidos el martes han seguido alimentando estas críticas. Que el modelo A se haya estancado en todos los territorios, incluso en Álava, donde el PP esperaba un aumento de aulas en castellano en la red concertada, es para esta formación consecuencia de las "presiones" que se han ejercido en algunos centros. El secretario general del PP vasco, Iñaki Oyarzábal, señaló ayer que el departamento "no ha hecho las cosas bien y no ha actuado de manera eficiente", para añadir que el Gobierno Vasco no está cumpliendo los compromisos adquiridos en materia de Educación.

Por su parte, la consejera de Educación, Isabel Celaá, que confirmó que va a ser difícil que se abran nuevas aulas de modelo A el próximo curso, al margen de las que ya están en funcionamiento, defendió que las familias vascas "han ejercido plenamente su libertad lingüística" a la hora de realizar las prematrículas de sus hijos.