vitoria. La crisis ha abaratado los pisos en Álava, pero de paso ha congelado los sueldos y provocado numerosos ERE, con lo que el acceso a la vivienda sigue estando tan complicado o más que antes. Y no sólo para los ciudadanos autóctonos. Los inmigrantes se han convertido en uno de los blancos más afectados por la recesión, que ha forzado a muchos de ellos a solicitar pisos de protección oficial en régimen de alquiler. Los datos son claros y la lista de aspirantes de Etxebide se ha convertido ya en un indicador que sirve para medir fielmente el impacto de la crisis en la CAV.
A lo largo de los últimos años, el volumen de población extranjera ha aumentado de forma sostenida en Euskadi y, en la actualidad, representa al 6% de los habitantes. Álava es el territorio que, porcentualmente, concentra más extranjeros, con un 8,2% frente al 6% de Bizkaia y Gipuzkoa. En términos globales, la población inmigrante de la CAV ha pasado de representar al 5,5% de los inscritos en Etxebide en 2005 al 10% en 2008 y al 12% en la actualidad.
De acuerdo con los últimos datos que ofrece el Observatorio de Vivienda del Gobierno Vasco, a lo largo del último lustro se ha duplicado el número de personas de nacionalidad extranjera apuntadas en Etxebide. Concretamente, han pasado de 6.425 aspirantes en 2005 a 13.895 en 2009. Centrados en el último ejercicio, en el que la crisis ha tenido una mayor repercusión, la cifra de extranjeros inscritos en las listas de Lakua ha aumentado en un 22%, mientras que la de nacionales ha disminuido en un 1% durante el mismo periodo.
Centrados en el ámbito territorial, el informe del Ejecutivo autonómico precisa que el 42% de los extranjeros inscritos residen en Bizkaia, el 32% en Álava y el 23% en Gipuzkoa, mientras que del 2% restante no se dispone información de empadronamiento. En Álava, el porcentaje de solicitantes inmigrantes (el 32,6% sobre el total de la CAV) es mucho mayor que el de nacionales (el 15,7%). Un fenómeno que no se repite en los otros dos territorios vascos.
La opción mayoritariamente elegida por los ciudadanos inmigrantes que solicitan acceder a una vivienda protegida es la del alquiler. Tanto es así que un 52% de los aspirantes reclama exclusivamente pisos en este régimen. Otro 40% señala tanto opciones de compra como de arrendamiento y únicamente el 8% quiere acceder exclusivamente a viviendas en propiedad. En el caso de los nacionales, sólo el 20% pide VPO en alquiler, un 39% modalidades indistintas y el 42% desea viviendas en propiedad.
A la hora de determinar el perfil del solicitante extranjero inscrito en Etxebide, aún priman las personas de entre 40 y 59 años, si bien cada vez ganan mayor peso los demandantes menores de 35 años. Al contrario que sucede con los solicitantes nacionales, en el colectivo de inmigrantes se da una mayor proporción de mujeres (52%) que de hombres. El 55% de estos aspirantes está casado y su nivel de ingresos ha aumentado progresivamente en los últimos años hasta situarse en una media de 11.800 euros en 2008.