vitoria. El colectivo de apoyo a los presos Salhaketa valoró ayer de forma bastante positiva la sentencia que condena al ex subdirector de Seguridad de Nanclares a un año de prisión y otros seis de inhabilitación absoluta. Aunque el veredicto de la Audiencia Provincial alavesa absuelve al acusado de tres de los cuatro delitos que en un principio se le imputaban, las especiales circunstancias que han rodeado a este caso no hacían ser excesivamente optimistas a sus portavoces respecto a su resolución.

César Manzanos, por ejemplo, se mostró gratamente sorprendido tras conocer la sentencia dictada ayer, una sorpresa positiva e inesperada si se tiene en cuenta que en otros casos similares ha prevalecido la versión de los acusados frente a la de los demandantes. "Estamos muy contentos porque se han reconocido los derechos de estas presas", manifestó también en declaraciones a este periódico el coordinador de Salhaketa en Bizkaia, Carlos Hernández.

Hernández valoró, por ejemplo, que en la propia sentencia se reconozca que las tres acusaciones por las que finalmente no se ha podido imputar al ex subdirector de Seguridad tienen bastante contenido, aunque la existencia de una duda razonable en todas ellas ha impedido demostrar su culpabilidad. "Todas tienen fundamento, lo que es un hecho a tener en cuenta, pero solamente en una no quedaba ninguna duda razonable", explicó. El coordinador también celebró el hecho de que se haya desmontado la tesis de que había existido un complot contra el acusado por parte de las denunciantes. El colectivo realizará mañana una valoración exhaustiva de la sentencia durante una rueda de prensa. Hoy, sus abogados y responsables se reunirán para analizarla y sopesarán si el dictamen de la Audiencia se recurre.