Copenhague es una ciudad blindada con un dispositivo de seguridad sin precedentes para acoger desde hoy la Conferencia de la ONU sobre cambio climático (COP 15) que reunirá a líderes internacionales y numerosas Organizaciones No Gubernamentales. La principal movilización será una manifestación el 12 de diciembre. El dispositivo de seguridad danés, que asciende a 84 millones de euros, incluye la implantación temporal de nuevas competencias para la Policía, como la posibilidad de realizar detenciones preventivas de 12 horas ante el riesgo de incidentes. Dificultar el trabajo de los agentes policiales estará penado hasta con 40 días de prisión, cuando antes sólo ocasionaba una multa, y las sanciones económicas por negarse a seguir las instrucciones de la Policía se duplicarán. La Policía controlará la frontera con Alemania para impedir la llegada de activistas sospechosos, y contará con la ayuda de agentes alemanes y suecos y con 1.100 personas del servicio de protección civil, cuyo trabajo concreto no ha sido aclarado por las autoridades. Se espera la presencia de 10.000 activistas de todo el mundo que se alojarán en escuelas, instituciones, pabellones y casas particulares.