El dolor de cabeza es uno de los síntomas que más tenemos. Ya sea al salir de trabajar, al finalizar un día interminable o simplemente estando en casa. Hay muchas veces que achacamos este dolor a situaciones diarias y no nos solemos confundir, pero seguro que has oído y, seguro que también, dicho, la frase de “no entiendo porque me duele la cabeza”. Es un misterio ese instantáneo y repentino dolor que hace que nuestras actividades habituales no sean tan llevaderas ni estemos con el mismo ánimo. Aquí te vamos a explicar cuál puede ser la causa de este insufrible dolor de cabeza y cuándo saber si es necesario acudir a un médico experto.
Cefalea o dolores de cabeza
La cefalea es un término que hace referencia a los más de 150 tipos de dolores de cabeza que existen. Esta gran cantidad de variantes se pueden dividir en dos grandes categorías: las cefaleas primarias, que constituyen el 90% del total siendo las más comunes, y las cefaleas secundarias, que son la consecuencia de otra enfermedad que cursa al mismo tiempo que la cefalea y, por lo tanto, se le añaden otros síntomas.
Dirigiéndonos principalmente al primer grupo, estos dolores de cabeza son uno de los trastornos más frecuentes y tienen un origen benigno. Aún así, como hemos comentado, pueden aparecer otro tipo de síntomas asociadas a enfermedades de mayor gravedad, por lo que es esencial acudir a tu médico primario para conocer si estos síntomas se deben tratar con cautela.
Aún conociendo bien tu cuerpo y las causas más comunes por las que sueles notar presión en partes concretas de la cabeza, es esencial comprender que la localización no es el único criterio fiable para saber la causa de los síntomas, aunque puede ser de ayuda.
Zonas de dolor y causas
- Frente. Este dolor en la parte frontal de nuestra cara suele estar relacionado con la cefalea tipo tensión, muchas veces desencadenada por el estrés. Pueden surgir problemas en la vista y no se debe descartar la posibilidad de que emerja una migraña.
- Detrás de ambos ojos. Si tenemos la zona de la nariz, ojos e incluimos la frente, podemos estar sufriendo de sinusitis, inflamación de los senos paranasales (cavidades óseas llenas de aire ubicadas alrededor de la cavidad nasal) o patologías en las vías respiratorias (infecciones o alergias).
- Sienes. También por tensión, a este dolor de cabeza se le une la posibilidad de trastornos de la articulación en la mandíbula como el bruxismo (apretar involuntariamente las estructuras dentales).
- Parte posterior de la cabeza. Entre los dolores más frecuentes se encuentran los de la región occipital de la cabeza, la parte posterior, que puede ser causado por una patología cervical, una migraña o, de nuevo, por tensión. Daño en el nervio occipital también puede causar este tipo de cefalea.
- Unilateral (hemicraneal). La jaqueca o migraña suele notarse con más énfasis en las zonas unilaterales de la cabeza (en uno de los dos lados).
- Alrededor del ojo. No es muy común, pero la inflamación en los nervios y músculos oculares pueden formar este dolor en la zona de la órbita del ojo.
- Dolor facial. La neuralgia del trigémino, una afección que afecta al nervio del trigémino que es el responsable de la sensación facial, se caracteriza por un dolor corto e intenso en un lado de la cara.
Aunque una misma cosa pueda causar dolor en diferentes partes de nuestra cabeza, es importante identificar la localización para poder obtener de forma más rápida y sencilla una posible causa. Sin ser información del todo contrastada, es necesario tener comunicación constante con el médico o neurólogo si estos dolores de cabeza son comunes o van aumentando paulatinamente.