Un estudio científico, en el que ha participado el investigador de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Asier Mañas, establece que caminar cada día entre 7.000 y 9.000 pasos reduce el riesgo cardiovascular de mortalidad prematura.

La cifra óptima serían 8.800 pasos, aunque con 7.200 se alcanzan la mayoría de los beneficios en la población adulta ha informado la UCLM.

El estudio, publicado en la Journal of the American College of Cardiology, revista de referencia en cardiología, propone por primera vez el número óptimo de pasos con el cual se alcanza la mayor parte de los beneficios en la mayor parte de las personas, y demuestra, además, que el ritmo al que se dan los pasos tiene también beneficios adicionales.

"Durante mucho tiempo, la creencia popular ha sido que se necesitaban alrededor de 10.000 pasos diarios para mejorar la salud, una concepción que surgió en Japón en la década de 1960 sin respaldo científico", ha explicado Mañas, quien ha señalado que el estudio en el que ha participado respalda la idea de que un objetivo de salud razonable para la mayoría de las personas está en el rango de 7.000 a 9.000 pasos diarios.

Datos de doce estudios a nivel mundial

La investigación ha sido realizada en colaboración entre investigadores e investigadoras de Holanda (Radboud University Medical Center), España (Universidades de Castilla-La Mancha, Complutense de Madrid y Granada) y Estados Unidos (Iowa State University) e incluye datos de doce estudios a nivel mundial.

Entre ellos, se encuentra el Estudio Toledo Envejecimiento Saludable (ETES), llevado a cabo en el Hospital Virgen del Valle (Complejo Hospitalario Universitario de Toledo).

No obstante, dar más pasos no supondría ningún riesgo y alcanzar los 16.000 pasos al día "no conlleva riesgos y, de hecho, puede ofrecer beneficios adicionales en comparación con caminar de 7.000 a 9.000 pasos", ha agregado el investigador.

El estudio no revela ninguna diferencia entre hombres y mujeres, pero señala que la cantidad de pasos objetivo debe adaptarse a la edad, ya que los jóvenes pueden aspirar a metas más altas.

Otro descubrimiento relevante es que caminar a un ritmo más rápido se relaciona con una disminución en el riesgo de mortalidad, independientemente de la cantidad total de pasos al día.

En resumen, "observamos que un incremento de 1.000 pasos diarios, alrededor de 10 minutos andando, podía tener un impacto en la salud, lo cual puede ser un objetivo alcanzable para todas aquellas personas con bajos niveles de actividad física", ha señalado.