Euskadi es un territorio muy famoso, entre muchas cosas, por su belleza. Ya sea por sus valles, montañas, y hasta playas, lo cierto es que su abanico de rincones es infinito. Precisamente una de estas últimas, de todas las que podemos encontrar en el litoral vasco, guarda un curioso fenómeno que la hace única e irrepetible.
Mientras que algunos arenales destacan por su naturaleza, historia y ubicación, este es conocido por albergar un baserri, algo poco común en entornos como este. Es, además, fuente de algunas obras literarias de renombre. ¿A qué enclave nos referimos?
Un baserri en plena costa
El lugar que describimos no es otro que la Playa de Saturraran, en Mutriku (Gipuzkoa). A diferencia de otras, esta alberga una curiosidad: la presencia del único baserri marino tanto de Euskadi como de todo el Estado. Es una edificación histórica que ha resistido en pie todos estos años.
Asimismo, ha servido como fuente de inspiración literaria, puesto que novelas y relatos como 'Las inquietudes de Shanti Andia' de Pío Baroja o 'Siete Relatos' de José María de Areilza incluyen elementos relacionados con este caserío.
El aura de la leyenda
Según cuenta la leyenda, antiguamente, dos jóvenes amantes conocidos como Satur y Aran vivían cerca de la costa. El primero era un bravo pescador que se enfrentaba al mar a diario y regresaba a casa sano y salvo. Sin embargo, el destino hizo que esto cambiase para siempre.
Un día, una tormenta irrumpió con fuerza en el mar y Satur no pudo regresar a tierra firme. Por su parte, Aran, resignada, comprendió que jamás volvería a ver a su amado. Como respuesta, presa de la desesperación, esta maldijo al mar la pérdida de Satur, pidiendo ser llevada también por sus aguas.
Aquella noche, tras escucharse un gran estruendo, Aran desapareció, pero no por completo: en el mismo punto donde estuvo esperando la vuelta de Satur, surgieron dos grandes rocas, conocidas como Saturraran. Hoy en día, estas dos formaciones evocan esta trágica historia de amor.
La playa de Saturraran
Este enclave es muy popular tanto por su arena suave como por sus aguas limpias, rodeada de acantilados y una abundante vegetación y bien alejada de áreas urbanas. Por si fuera poco, su longitud, de 300 metros, la convierten en una buena opción para pasear por su orilla.
El entorno natural de la playa está protegido, garantizando la conservación y preservación de su biodiversidad. Del mismo modo, la circunvalan senderos como la ruta del flysch que conecta Mutriku con Deba, dos municipios guipuzcoanos con mucho encanto.
Más playas a visitar
Al margen de la mencionada, en Euskadi contamos con más playas llenas de historia y belleza natural. Estas son algunas de las más representativas que podemos encontrarnos en la costa.
Playa de Itzurun
Ubicada en Zumaia (Gipuzkoa), está cercada por acantilados de flysch que datan de millones de años, formando un paisaje geológico singular. Es un punto popular por ser el escenario de algunos rodajes cinematográficos, como la serie 'Juego de Tronos’ de HBO.
Playa de Atxabiribil
Situada en Sopela (Bizkaia), es muy conocida entre los surfistas y amantes de los deportes acuáticos. Debido a su amplia superficie y entorno, limitando con la playa de Arrietara y otras zonas naturales, es uno de los principales tesoros de la costa vasca.
Playa de Bakio
Esta playa es otra de las más populares de todo Bizkaia, en parte por su cercanía a San Juan de Gaztelugatxe. Sus condiciones para practicar actividades acuáticas y su contorno, ideal para dar paseos familiares, convierten la de Bakio en una opción interesante.
Playa de Aritzatxu
La playa de Aritzatxu, localizada en Bermeo, no muy lejos de Urdaibai, es una de las menos conocidas de Bizkaia, así como una de las más bonitas. Después de dar un paseo por el municipio, nada como refrescarse entre sus limpias aguas y arena fina.
