El abogado Carlos Neira reiteró en diversas ocasiones en el Tribunal Supremo que el empresario Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, le "autorizó" para pactar con la Fiscalía y le dijo que entendía lo que es una conformidad penal, que implica reconocer los delitos.
A finales de enero del año pasado, Neira explicó "en detalle" a González Amador en qué consistía llegar a una conformidad con el fiscal para evitar ir a juicio: "Habría que hacer un reconocimiento judicial" de los hechos por los que le acusa y, después, se trata de lograr "la menor pena posible", aunque, "lógicamente, una conformidad supone una condena", pese a que pueda suspenderse.
Declaración por el "célebre correo"
Esto es lo que explicó el pasado 27 de mayo el abogado al juez del Tribunal Supremo Ángel Hurtado, interesado en conocer los pormenores del "célebre correo" que considera "clave" en la investigación contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez, por presunta revelación de secretos.
Se trata de un correo que Neira envió el 2 de febrero de 2024 a la Fiscalía y a un abogado del Estado en el que admitía en nombre de González Amador la comisión de dos delitos fiscales, por los que ahora está procesado en otro juzgado. La supuesta filtración de este correo centra la investigación.
Durante su declaración ante el juez, González Amador explicó que desconocía dicho correo, que fue iniciativa de su abogado, en cuyas manos dejó la gestión de las comunicaciones, y mantuvo que no defraudó a Hacienda.
Días después, el abogado relató a Hurtado que, como dijo su cliente, González Amador le comunicó que quería la solución que "menos ruido" generase y que no perjudicase a su pareja y, tras explicarle en lo que consistía una conformidad, le dijo que lo comprendía, según la transcripción a la que ha tenido acceso EFE.
"Él me dice que entiende lo que es la conformidad penal y que adelante, que ya lo deja en mis manos", indica el abogado, que niega que reenviase el correo a nadie más.
Niega que supiese que el pantallazo que envió a González Amador con otro correo que se cruzó con el fiscal Julián Salto fue enviado al móvil de Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de Ayuso, a quien dijo haber visto por primera vez el 14 de marzo de 2024.
El abogado no respondió a si esas negociaciones con el fiscal cesaron a raíz de esa filtración, al considerar que afectaba al derecho de defensa.
Alberto González Amador, que es acusación en esta causa, se encuentra procesado por dos delitos fiscales y falsedad documental en un juzgado de Madrid por el presunto fraude de 350.951 euros a Hacienda.