El Senado, a iniciativa del PNV, ha aprobado reclamar que Euskadi, así como otras entidades gubernamentales subestatales, sean tenidas en cuenta en el Plan de Trabajo de la próxima Cumbre Unión Europea-CELAC, que celebrará su cuarta edición el próximo mes de noviembre en Colombia, dado el relevante papel que juegan en el fortalecimiento y desarrollo de las relaciones entre ambas instituciones.
En una nota, el PNV ha destacado que sería la primera vez que las instituciones vascas participarían en este encuentro entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe. “Se trata de aprovechar la cita para consolidar los logros alcanzados en Bruselas en 2023, profundizando la relación birregional”, ha señalado Luke Uribe-Etxebarria, senador de la formació,n en el pleno celebrado este miércoles en la Cámara alta.
Las relaciones de América Latina con la UE han estado marcadas por una historia compartida de vínculos políticos, económicos, sociales y culturales, posibilitando una "asociación estratégica de indudable relevancia global, habida cuenta de que entre ambas suman una población superior a los 1.000 millones de habitantes, representando el 14% de la población mundial y el 21% del PIB mundial, además de compartir una de las redes comerciales de mayor densidad del mundo", afirma el partido jeltzale.
Guerra arancelaria
Todo ello cobra ahora más importancia en el contexto de guerra arancelaria desatada por Estados Unidos. “La Administración Trump ha endurecido su política comercial y migratoria en América Latina. En este escenario, la UE tiene la oportunidad de consolidarse como un socio confiable, promoviendo acuerdos comerciales, fortaleciendo relaciones bilaterales y ofreciendo alternativas de inversión estables en la región”, ha argumentado Uribe-Etxebarria.
La iniciativa del PNV reclama que la Cumbre trabaje sobre un Plan de Trabajo "pragmático, concreto y realizable" que enfatice en temas de interés común, versando acerca de los derechos humanos y las libertades, la democracia, la soberanía, el multilateralismo inclusivo, la migración, la paz, la cooperación internacional, el comercio justo, la cooperación empresarial y financiera, la justicia social y laboral, la seguridad ciudadana y la lucha contra la delincuencia organizada, el cambio climático, la gestión de los océanos y del agua potable y salubre, la salud frente a emergencias, la lucha contra la violencia de género o el derecho de los pueblos indígenas.