En 2006, el PP recogió firmas en contra del Estatut, cuyo cepillado por parte del Tribunal Constitucional desató una ola de desafección de los catalanes hacia el Estado; este domingo, pretende exhibir músculo con una protesta multitudinaria en contra de la amnistía para los acusados del procés; y en las últimas horas, en una actitud cercana al boicot, se ha quitado los auriculares mientras otros representantes políticos se expresaban en las lenguas cooficiales en el Congreso de los Diputados... La sombra del PP se cierne sobre cualquier acuerdo que pueda alcanzar un Gobierno de Pedro Sánchez para el encaje territorial de Euskadi y Catalunya, un acuerdo que podría quedar en agua de borrajas con un futuro cambio de gobierno favorable al PP, o con un recurso al Tribunal Constitucional. En este contexto, el PNV apela cada vez con mayor claridad al PP para que abandone esta estrategia de confrontación, cambie, y se incorpore al diálogo sobre el modelo territorial.

Si el lehendakari Urkullu ya planteó que sería bueno que el PP participase en su propuesta de convención constitucional, este jueves ha sido Andoni Ortuzar quien ha solicitado a los populares que abandonen su “derechización” y se impliquen en un acuerdo para que sea duradero, sólido y válido para una o dos generaciones, tal y como dijo en Radio Nacional de España. 

El PNV no oculta que hoy en día es prácticamente una quimera que el PP se incorpore a un consenso, y el acuerdo con los propios jeltzales sería imposible, pero Sabin Etxea insiste en lanzar este llamamiento para que Génova se modere y, en paralelo, se ha cuidado mucho de mantener aunque sea unos mínimos de cortesía política con Alberto Núñez Feijóo, aunque la negativa a su investidura ha sido categórica

El propio Ortuzar se reunió cara a cara con Feijóo el 7 de septiembre para volverle a comunicar que el PNV tumbará su investidura la semana que viene, porque una legislatura del PP estaría totalmente condicionada por la ultraderecha de Vox. A Ortuzar se le preguntó por la reunión y por la razón que explica que no se comunicara a la prensa. El presidente del EBB del PNV aseguró que la cita fue discreta porque de ahí “no podía salir nada distinto” de lo que ya le comunicó por teléfono a finales de julio, su negativa a una investidura que dependiera de Vox. “Iba a manifestarle lo que ya le había dicho el 24 de julio. Nos reunimos por cortesía política y para conocernos mejor, que siempre es positivo”, dijo. Ortuzar le quiso reconocer a Feijóo que viene de gestionar una comunidad autónoma, Galicia, y tiene una “sensibilidad más fina” que otras voces como la de Pablo Casado, pero volvió a darle un no rotundo porque los caminos del PNV y el PP no se pueden cruzar, ya que en mitad del pasillo está Vox. Por ello, no dio opción a que Feijóo le hablara de la investidura y le pidió que no le pusiera “más cosas en la cesta, porque en esa cesta está Vox”.

Modelo territorial

A partir de ahí, a Ortuzar le preguntaron si está interesado en mantener la relación con el PP. El jeltzale repitió que el PNV no cree en una política de bloques monolíticos que “no es real”, como habría quedado demostrado en aquellos debates que han tenido lugar en Euskadi y donde han sumado sus votos PP, Bildu y Podemos. Y añadió que le gustaría que el PP se sumara al diálogo sobre el modelo territorial, aunque admite que, si acude con el discurso que está defendiendo ahora mismo, el acuerdo sería imposible.

Ojalá cambiara y, si cambiara y entrara en el acuerdo, ese acuerdo sería muy largo en el tiempo, sería muy sólido porque, si no, los acuerdos que hagamos ahora con un bloque, siempre van a estar sometidos al calendario político”, en referencia a los cambios de gobierno. Pidió al PP que se quite los “tics” de radicalización y manifestaciones porque “esta derechización y esta política gestual no les está haciendo ningún favor”.

“Si el PP cambiara, ¿por qué no hablar con él e incorporarle a la senda de la normalidad y los acuerdos?”, dijo, con el objetivo de que, independientemente de quién esté en La Moncloa en próximas elecciones o de futuros cambios de gobierno, se pueda articular un “modelo de Estado que sea más respetuoso con la realidad plurinacional” y “un pacto para una generación o para dos”. Ortuzar recordó que la Constitución española ha sufrido un vaciamiento de poder por la cesión de poderes a Europa, y se preguntó por qué no se puede hacer de puertas adentro con un nuevo modelo territorial. “Las constituciones no son sagradas, no son el Antiguo Testamento”, zanjó.

Sánchez, "enigmáticamente valiente"

Mientras el PNV permanece a la expectativa de que Sánchez mueva ficha en profundidad a partir del viernes de la semana que viene, una vez que fracase la investidura de Feijóo, Ortuzar ya deja ver que algunos mensajes “enigmáticos” del presidente en funciones parecen sugerir valentía y autocrítica con respecto a la judicialización del conflicto en Catalunya, algo que aplauden los jeltzales. Ortuzar comparte el marco negociador de Carles Puigdemont desde Junts, una Ley de Amnistía para desjudicializar el conflicto; un mediador por la desconfianza que genera en Junts el viraje repentino de un PSOE que hace unos años apoyaba la suspensión del autogobierno catalán; y buscar soluciones también en el ordenamiento internacional, si desde Madrid se dice que el español es inmutable.