- La portavoz de EH Bildu en el Parlamento Vasco, Maddalen Iriarte, insistió ayer en la urgencia de plantear el debate sobre una fiscalidad “mucho más progresiva y equitativa” en Euskadi y, ante la celebración del 1 de Mayo, señaló la necesidad de “dar respuestas contundentes desde la izquierda” porque la crisis actual tras la pandemia y la guerra en Ucrania “no la pueden pagar los trabajadores”.
En un acto político en Barakaldo con parlamentarios, junteros y concejales de EH Bildu, Maddalen Iriarte recordó también a los “miles y miles de niños, mujeres y hombres que están sufriendo el horror de la guerra, en todas las guerras, en Ucrania, en el Sáhara, en Palestina, en Afganistán”, así como a las personas que huyen de todas esas guerras.
Asimismo, se refirió a que esta semana se ha conmemorado el 85 aniversario del bombardeo de Gernika y señaló que “el fascismo quiso destruir a los hijos de este pueblo” entonces y, ahora, “también el autoritarismo está amenazando el mundo pero resistiremos”.
Por otro lado, señaló que se vive un “momento difícil” tras la crisis de la covid y luego la invasión de Ucrania que ha traído el incremento de los precios de la luz, de los carburantes y de la cesta de alimentos básicos. Según destacó, EH Bildu, tanto desde las instituciones que gobierna como desde la oposición, está demostrando que las cosas “se pueden hacer de otra manera, en un verdadero trabajo en común”.
En ese sentido, destacó el trabajo de EH Bildu impulsando “políticas públicas de protección y bienestar para no marginar a nadie”, una economía “de protección y bienestar para que mientras los de siempre sean más ricos los demás no seamos más pobres”, y “manteniendo el reto de la protección y el bienestar para que la gente joven pueda realizar proyectos de vida dignos”.
En estos tiempos de “autoritarismo e incertidumbre y precariedad” y ante la celebración del 1 de Mayo, Iriarte dijo que es necesario “dar respuestas contundentes desde la izquierda” y defendió “la solidaridad ante la igualdad, la incertidumbre y el autoritarismo”, además de una políticas públicas “fuertes”.
Tras recordar que “otros toman las decisiones que nos conciernen” en el ámbito político y económico, ha defendido “tener voz propia” y no ser “siervos de los demás” y se preguntó “cómo vamos a responder como pueblo” a una “situación de incertidumbre, de inestabilidad que ha venido para quedarse” a su juicio. “¿Cómo cuidarnos, cómo vamos a hacer para no dejar a nadie en la cuneta, cómo vamos a compartir nuestro bienestar?”, interpeló, para apostar por “trabajar conjuntamente” para “dar respuestas”.
