- Eneko Andueza aprovechó ayer el comité nacional ordinario del PSE para volver a reivindicar la aportación de los socialistas y lanzar algún recado incluso a su socio de gobierno, el PNV. Andueza comenzó haciendo referencia a la guerra de Rusia contra Ucrania y a que el PSOE apuesta por ayudar porque “en España se perdió una guerra cuando los países decidieron no intervenir y se abrió la puerta a 40 años de dictadura”. Parecía un aviso para EH Bildu y Unidas Podemos, como lo pareció su alusión a que el PSE no es tanto “de decir, sino de hacer”. Citó sus reuniones con colectivos para acoger a los refugiados, y la competencia del Gobierno español al respecto. Pero el discurso terminó tocando otros palos como el acuerdo sobre el borrador educativo en el Parlamento, donde llegó a decir: “El eje de la negociación hemos sido los socialistas”.
Defendió que el acuerdo da el protagonismo al sistema público y condiciona los conciertos a la lucha contra la segregación, además de “avanzar en el trilingüismo de Isabel Celaá”. “No queremos una guerra de lenguas. El euskera es nuestra lengua y no queremos que nadie la utilice políticamente. Ponemos en el centro la capacidad de los alumnos. No ha sido sencillo, ha habido que pelearlo mucho”, dijo, para añadir que “todos han venido” a lo que el PSE “decía y ponía en el centro del debate”. “El eje de la negociación hemos sido los socialistas”, zanjó.
Andueza defendió que el PSE debe liderar el país, aludió a las reformas que tienen en cartera en Lakua como la RGI, y sacó pecho con la reforma laboral de Sánchez, donde volvió a hacer sangre con el voto en contra del PNV. Dijo que la contratación indefinida ha llegado al 16% y que se ha logrado gracias al PSE “y a pesar de los nacionalistas, que sumaron los votos a la derecha y la extrema derecha”, y no les importó “avalar la reforma de Rajoy”. “PNV y EH Bildu estaban con sus complejos, en asuntos identitarios, tirando de calculadora electoral, votando con PP y Vox, dejando a un lado a la clase trabajadora”, dijo.