- La clase política no otorga demasiada credibilidad a José Manuel Villarejo en relación a sus palabras sobre el 17-A y el papel jugado por el CNI, que a su juicio estuvo involucrado en los atentados y “se le fueron de las manos”. Sin embargo, el independentismo catalán sí exige que desde el Ministerio del Interior se aporten datos y pruebas que refuten la versión de Villarejo.
A este respecto, ayer el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, calificó al excomisario como un “fanfarrón” y un “mentiroso compulsivo”, pero reclamó que Fernando Grande-Marlaska comparezca para desmentir a Villarejo y “decir que este señor miente con datos”.
En una entrevista en Onda Cero, Rufián recordó que el excomisario fue un “señor con mucho poder” y que en el momento en el que los Mossos investigaron los atentados en Barcelona faltaba la información que aportó Villarejo.
“Recuerdo al PSOE clamar porque Villarejo decía según que cosas del PP y ahora no importa lo que dice”, expresó Rufián, al tiempo que señaló que los populares piden cada semana una comisión de investigación “por casi cualquier tema”, mientras que a ERC se le critica por reclamar una sobre el 17-A. En esa línea, añadió que “no pasaría nada porque viniese” el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en esa época, Félix Sanz Roldán, “a dar su versión del tema”.
Ayer mismo, ERC, EH Bildu, Junts, Adelante Andalucía, Més per Mallorca, Geroa Bai y Compromís registraron en el Senado, como ya hicieron unos días en el Congreso, una propuesta de creación de una Comisión de investigación sobre los atentados del 17 de agosto de 2017.
Según anunció la senadora de ERC Laura Castel, estas formaciones reclaman que se aclaren las incógnitas sobre los atentados: “Las declaraciones de un excomisario en sede judicial deberían ser motivo suficiente para investigar la actuación de instituciones oficiales como el CNI en relación con los atentados del 17 de agosto. Las víctimas y el resto de ciudadanos merecemos verdad, justicia, transparencia y reparación”.