- CCOO de Euskadi, que participará en los actos organizados a lo largo de la presente jornada por la red ciudadana Sare, reclamó ayer al colectivo oficial de presos de ETA “un impulso en el reconocimiento del daño injusto causado”. El sindicato defendió además que se apueste “de forma decidida por la reinserción restaurativa” porque es positiva para los reclusos, las víctimas y la propia convivencia.
Una delegación de CCOO de Euskadi, encabezada por el miembro de la ejecutiva Alfonso Ríos, asistirá al acto convocado hoy a las 10.30 horas en el Palacio Euskalduna “con distintas víctimas de ETA, los GAL y abusos policiales”. Para la tarde quedarán varios centenares de marchas por los derechos de los presos.
En un comunicado, CCOO señaló que “la situación penitenciaria ha cambiado notablemente” desde que el EPPK, el colectivo de presos de ETA, apostara en el verano de 2017 “por las vías legales” y con el cambio en el Gobierno español a mediados de 2018. Por contra, añadió que “sigue pendiente el problema de las condenas incompatibles con la reinserción de la Ley 7/2003 para aproximadamente 15 presos, con penas de hasta 40 años efectivos”.
La central aseguró que “es el momento de la reinserción restaurativa”, y apuntó que “el ejemplo de los presos de la vía Nanclares, tan bien reivindicados en los encuentros entre Maixabel Lasa e Ibon Etxezarreta, y la senda de ese pequeño grupo del EPPK que ha conseguido ya el tercer grado señalan el camino”.
“Un camino -precisó- con tres grandes virtualidades: es bueno y factible para los presos de ETA, reparador para sus víctimas y constructivo para la convivencia del conjunto de la sociedad vasca”, aseveró.
El sindicato subrayó que, “para transitar con sinceridad esa senda, juega un papel clave el entorno político y social de los presos de ETA” ya que, en su opinión, “convendría que impulsaran hasta las últimas consecuencias la empatía necesaria para reconocer el daño injusto causado”. De este modo, concluyó que “sería importante que los presos de ETA y sus organizaciones de apoyo asuman esa responsabilidad histórica, a la altura de los graves delitos que cometieron o apoyaron”.