- Coordinadores y representantes de Eusko Alkartasuna críticos con el sector oficial denunciaron ayer que se les esté negando la información de cuántos compromisarios van a contar con derecho a voto en el próximo congreso de la formación soberanista y temen que puede existir “una tentación de subvertir la lógica democrática” por parte de la dirección liderada por Eba Blanco. Así lo trasladó ayer María José Mangado, presidenta de la asamblea de EA en Navarra, acompañada de Javier Estebanez, quienes reclamaron al sector oficial “diálogo y transparencia para que el cónclave -anunciado para los días 19 y 20 de febrero y 5 y 6 de marzo de 2022- se celebre con las garantías democráticas básicas”.
Por de pronto, aseguraron que en las asambleas celebradas hasta ahora en las capitales de la CAV y Navarra, de los 51 compromisarios que se han podido elegir, 44 pertenecen al sector afín al exlehendakari Carlos Garaikoetxea y solo 7 al oficial encabezado por Blanco. “Es decir, más del 86 % del total”, destacaron, resaltando que el sector crítico ha firmado también resultados “incluso más abultados” en los municipios vizcaínos de Getxo, Muskiz, Portugalete, Sestao, Durango y Txorierri. En estas asambleas locales se avalaron también “por gran mayoría” sendas enmiendas a la totalidad de las ponencias Política y Estatutaria para “estructurar el partido de forma democrática, transparente y abierta a la participación de toda la afiliación” y para “definir un encaje de EA en EH Bildu que respete y recupere nuestra autonomía y personalidad política propias” dentro del partido soberanista. En este contexto, censuraron las ponencias de los oficialistas que, a su entender, buscarían “suprimir la elección de la secretaria general mediante un procedimiento de primarias o incluso impedir que la afiliación elija a sus coordinadores territoriales”.
“Se nos está negando saber cuántos compromisarios van a tener derecho a voto en el congreso. Lo hemos solicitado y se nos niega reiteradamente, lo que unido a la opacidad de la gestión del fichero de afiliados y a la negativa a realizar una auditoria para garantizar que no se compute a fallecidos, nos hace sospechar que puede haber una tentación de subvertir la lógica democrática”, alertaron. De esta manera, exigieron a Blanco que abandone la “vía represiva interna contra miembros del partido” y se asuma el resultado de la voluntad de la afiliación “libre y realmente expresada”.
Ya cuando se abrió expediente disciplinario a Miren Aranoa (coordinadora de Navarra), Esther Korres (coordinadora de Iruñea) y Maiorga Ramirez (candidato a la secretaría general, parlamentario y cabeza visible del sector crítico), indicaron que “las diferencias internas sobre el encaje de EA en EH Bildu deben resolverse poniendo urnas en los Alkartetxes, no expulsando a compañeros y compañeras de partido para condicionar y trampear el resultado de unas primarias, primero, y posteriormente, de un Congreso limpio y transparente que venimos pidiendo que se celebren hace ya demasiado tiempo”.
“Se nos niega saber cuántos compromisarios van a tener derecho a voto en el congreso”
Pdta. de la asamblea de EA en Navarra