La entrada en prisión del rapero Pablo Hasel para cumplir condena por enaltecimiento del terrorismo ha reavivado el debate iniciado por Podemos sobre la falta de calidad de la democracia mientras el Gobierno ha reconocido que un delito de este tipo no debería estar castigado con la cárcel.
La vicepresidenta primera, Carmen Calvo, considera que la pena de prisión "no procede" en los delitos de expresión si "no conllevan riesgo para la seguridad de las personas" y ha apuntado a la reforma en marcha del Código Penal, mientras Unidas Podemos ha anunciado que solicitará el indulto para Hasel.
Tras el Consejo de Ministros, Calvo no se ha pronunciado acerca del rapero detenido horas antes en el rectorado de la Universidad de Lleida, pero sí ha defendido que en la libertad de expresión quepan "reflexiones artísticas, culturales e intelectuales" para las cuales haya una "horquilla de comprensión y tolerancia" propia de una "democracia madura".
Calvo ha recordado que el Gobierno ha puesto en marcha una reforma de una nueva tipificación de los delitos de expresión con el fin de formar un "paraguas amplio y protegido" para estas reflexiones.
Según ha indicado Calvo, en esa línea se ha pronunciado el Tribunal Constitucional y por ello se encamina así la reforma iniciada ya por el Ministerio de Justicia, que propondrá cambiar delitos como los de odio, enaltecimiento del terrorismo, humillación a las víctimas, injurias a la Corona y contra los sentimientos religiosos.
En ese caso se encuentra Hasel, detenido por tener pendiente una condena a nueve meses de prisión por enaltecimiento del terrorismo.