- Portugalete, el barrio de San Ignacio (Bilbao), Algorta, Getxo, Berango, Lazkao, Sopela e Igorre. Es el mapa de las pintadas contra los batzokis del PNV y las casas del PSE durante los últimos días, que ayer sumaron dos nuevos emplazamientos en suelo vasco: Mungia y de nuevo en Portugalete, en el barrio de Repelega. El Bizkai Buru Batzar de la formación jeltzale condenó ayer por tercer día consecutivo unos ataques que, lejos de centrarse en el partido de Sabin Etxea o en los socialistas, suman una nueva víctima: Podemos Euskadi. El partido morado lamentó la aparición de una pintada “Podemos ere errudun” - “Podemos también culpable”, junto a otras proclamas referentes a la huelga de hambre emprendida por el preso de ETA Patxi Ruiz en su sede de la villa jarrillera.
El PNV insistió en el “evidente incremento de estas acciones mafiosas”, unas prácticas que están “fuera de tiempo, lugar y entendimiento”. “Estas actitudes intolerantes, intolerables y antidemocráticas solo dejan en evidencia que sus autores todavía no han entendido que la sociedad vasca está a construir en vez de a destruir”, aseveraron, de la misma forma que la ejecutiva vizcaína exigió el cese inmediato de estas actuaciones, “ya que lejos de aportar soluciones no hacen más que entorpecer la convivencia que anhela la mayoría de la sociedad vizcaína y vasca, que hoy quiere y debe centrar todos sus esfuerzos en derrotar la pandemia del coronavirus. E instamos a todos los partidos políticos de Bizkaia y de Euskadi a que se sumen públicamente a esta denuncia”, remataron.
Trasladada “la solidaridad y cercanía a la formación morada y su militancia” por parte del PNV, desde Podemos Euskadi aseguraron que “pintadas como las que han aparecido distraen de los debates realmente importantes”. Son unos “actos de intolerancia injustificables”, resumieron para asegurar que “las ideas se han de defender sin insultos ni frentismos”. Los consejales del partido de los círculos en Portugalete recordaron que “no es la primera vez que ocurre” y advirtieron de que “el diálogo y la convivencia son la base de la democracia”.
Por su parte, y pese al silencio que ha mantenido EH Bildu durante los últimos días, uno de los socios de la coalición independentista, Eusko Alkartasuna, afirmó que los ataques son “contraproducentes para lograr los objetivos que supuestamente defienden sus protagonistas: pacificación, derechos y libertad”. De la misma forma, y tras recordar que se siguen “vulnerando los los derechos de las personas presas”, indicaron que EA siempre ha apostado “por la pacificación, y seguimos haciéndolo. De ahí nacen la declaración firmada por nueve partidos políticos en el Congreso español, o la apoyada por miembros de diferentes países en el Europarlamento. Este es el camino, y seguiremos recorriéndolo, aunque haya quien crea que una pintada en una casa del pueblo o en un batzoki cambiarán la sociedad”.
Mientras tanto, el Movimiento Pro Amnistía y Contra la Represión comunicó que el preso de ETA Mikel San Sebastián ha emprendido una huelga de hambre indefinida en la cárcel de Murcia II en solidaridad con Ruiz. Según su último parte, este último fue atendido ayer por un médico, aunque no de su confianza.
“Máximo rechazo”. La junta de portavoces del Ayuntamiento de Sopela mostró anteayer una enérgica condena ante las pintadas aparecidas este pasado jueves en la iglesia de San Pedro y en las sedes de los grupos de PNV y PSE. Todos los grupos, excepto EH Bildu, que “no ha querido sumarse a la declaración”, según apuntaron fuentes municipales, mostraron “su máximo rechazo”. A través de un texto conjunto, manifestaron que “en democracia y con el objetivo de lograr una convivencia y normalización política no es admisible que edificios privados o sedes de ningún partido político sufran ataques de este o cualquier otro tipo”. Además, subrayaron que “actuaciones como estas no tienen cabida en la sociedad actual y no hacen más que obstaculizar la convivencia”. “Sopela es de todas y todos y por ello, solicita que se cuiden y respeten tanto los espacios públicos y privados”.