- Si antes Ciudadanos empezó a desangrarse por su escoramiento a la derecha y el abandono del posibilismo con Albert Rivera al frente; el giro al pacto con el Gobierno de Pedro Sánchez también ha provocado nuevas fugas en la formación naranja. Inés Arrimadas parece querer marcar perfil propio, resituar al partido en el centro y abandonar el lodazal del reproche de PP y Vox. Pasar de 57 diputados a 10 no solo acabó con la carrera de su mediático líder, sino que algunos pesos pesados como Toni Roldán y Francisco de la Torre se bajaron del barco, y otros dirigentes, aunque no se marcharon, como el vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, mantuvieron un pulso fuerte con la dirección.
La decisión última de Arrimadas de recuperar ese papel de "utilidad" habrá qué ver si le permite recuperar fuelle, pero también ha generado marchas como la del exportavoz del Congreso, Juan Carlos Girauta, que se dio de baja tras conocer el voto a favor de C's a la prórroga de la alarma y que, a través de su cuenta de Twitter, lo justificó así: "No trabajamos tanto para construir una bisagra". Otra de las que decidió irse es la que fuera portavoz en el Ayuntamiento de Barcelona Carina Mejías, por la imposibilidad de compartir el apoyo a un Gobierno que en su opinión ha hecho una mala gestión de la crisis sanitaria. Mientras tanto, la antigua cúpula riverista guarda silencio, incluido el propio Rivera, que aunque ahora es presidente ejecutivo de un despacho de abogados, sigue siendo muy activo en las redes opinando de la actualidad política y en especial atacando la labor de Sánchez.
Frente a estas críticas internas y otras presiones externas ante un posible cambio de rumbo, Arrimadas defendió el acuerdo pero lo limitó al decreto de alarma. "Hoy no se vota la investidura del señor Sánchez ni votamos una valoración del Gobierno. Se trata de salvar vidas y empleos" y evitar que el confinamiento decaiga el próximo sábado y, con ello, que la gente se vaya "a la casa de la playa". "Para esa responsabilidad, aquí va a haber 10 escaños, pero no para salvarle a usted o al Gobierno, sino para salvar a los españoles", valoró la líder naranja, quien negó que haya activado un cambio de estrategia. "Después de esta votación este Gobierno seguirá teniendo 155 escaños. Ni uno más y ni uno menos", zanjó.
Arrimadas, que volvió presencialmente al Congreso tras casi dos meses de ausencia por minimizarse el riesgo para su bebé, recordó que "no hay un solo español" que no sepa lo que opina de Sánchez y de Pablo Iglesias pero que la "responsabilidad" como fuerza política y los tres compromisos que ha conseguido arrancar al Ejecutivo le llevaban a votar a favor: contactos semanales con el Ejecutivo, y adecuar los ERTE y las ayudas a las pymes y autónomos una vez que acabe el estado de alarma.
"Entre ser útiles e inútiles lo tengo claro, y entre no aportar nada y salvar vidas y empleos, también. Nuestro voto es en conciencia y asumo absolutamente la responsabilidad del voto favorable", reiteró Arrimadas, que criticó a Sánchez por haberse perdido entre "improvisaciones", "rectificaciones" y una falta absoluta de diálogo y consenso con la oposición. "Seguiremos siendo muy críticos". En contraposición, reprochó al PP y Vox, sin nombrarlos, por situarse en la posiciones "cómodas".
"Tras esta votación este Gobierno seguirá teniendo 155 escaños, ni uno más y ni uno menos"
Líder de Ciudadanos