- En el pulso que mantienen el Gobierno español y diversas comunidades autónomas de cara a establecer quién va a liderar la denominada desescalada, la vuelta a la normalidad que podría iniciarse en mayo de forma paulatina tras las medidas de confinamiento, el Gobierno Vasco reivindicó ayer su capacidad plena para pilotar el viraje al nuevo escenario. Para ello enumeró una serie de razones, incluyendo la cercanía de las instituciones vascas a la población y su solvente gestión de la crisis sanitaria.
Fue la consejera de Salud, Nekane Murga, la que defendió que el Ejecutivo de Gasteiz está "en condiciones óptimas" de dirigir las medidas de desescalada del confinamiento en Euskadi. En una comparecencia telemática sobre la evolución de la pandemia en la CAV, respondió a las palabras del ministro de Sanidad, Salvador Illa, quien el pasado viernes afirmó que la desescalada será "dirigida" por el gabinete de Pedro Sánchez. Illa avaló que las comunidades autónomas realicen aportaciones y sugerencias, pero dejó claro que Moncloa será la que dirija el proceso de transición.
Sin embargo, los gobiernos vasco y catalán, al igual que algunos ejecutivos autonómicos del PP e incluso del PSOE, rechazan esta dependencia de Madrid. La consejera Murga desplegó ayer una serie de argumentos para defender una hoja de ruta propia, y así dijo que quienes están "próximos a las personas y a la población" en Euskadi son los servicios sanitarios, de salud pública "y el propio Gobierno Vasco". Explicó que "nosotros recogemos la información y enviamos al Ministerio lo que nos pide". Es precisamente por "esta labor de seguimiento y proximidad" por lo que "estamos en unas condiciones óptimas para poder realizar el seguimiento", un trabajo que, de hecho, "conforme a nuestra responsabilidad", ya realiza el Ejecutivo de Iñigo Urkullu.
La consejera vasca de Sanidad expuso a su vez las diferencias que existen entre los territorios y comunidades autónomas de cara a establecer medidas diferenciadas. También que Euskadi dispone de "un valor añadido" por su "capacidad de gestión que se ha demostrado durante la crisis". "Este es nuestro modelo de cara a realizar la desescalada", aseveró.
Se refería así a la nueva fase que puede iniciarse en la segunda quincena de mayo y que tendrá un aperitivo hoy mismo con la posibilidad que tendrán los menores de 13 años de salir a la calle cumpliendo una serie de condiciones -por espacio de una hora, en un radio de un kilómetro respecto al hogar familiar y acompañados de un adulto, entre otras-. Por el momento, el Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos aprobó el viernes ampliar el estado de alarma hasta el 9 de mayo, incluido. No se descarta, eso sí, que se produzcan más prórrogas a partir del día siguiente, en línea con lo que avanzó Pedro Sánchez el pasado 4 de abril respecto a que habría "sucesivos estados de alarma" al tiempo que se levantan las restricciones poco a poco.
En su rueda de prensa del viernes, Salvador Illa dijo que la desescalada se llevará a cabo en base a una serie de parámetros y condiciones establecidos por Moncloa. Sobre este particular, la responsable vasca de Salud recordó que los criterios establecidos por el Ministerio de Sanidad se han adoptado en reuniones con técnicos "en las que también participa Euskadi".
"Estos criterios los hemos cumplido durante la primera epidemia, hemos tenido capacidad de triplicar las camas de UCI y en el momento en el que ha habido un alto numero de casos, hemos tenido sectorizadas las urgencias y la atención primaria", apostilló en su comparecencia telemática de ayer.
Por este motivo, Nekane Murga defendió que "en este momento, por supuesto que Euskadi cumple los criterios", por lo que el Gobierno Vasco "está reprogramando su actividad para ser capaces de identificar qué es necesario hacer, con la máxima seguridad", en una nueva fase que definió como "no covid".
"Estamos analizando qué numero de personas van a poder acudir a esas actividades no covid y vamos a hacerlo con la máxima seguridad", insistió. "Tuvimos capacidad de dar respuesta en el inicio y durante la primera ola en la asistencia sanitaria. Estamos aprendiendo de lo que hicimos y vamos a estar siempre alerta y preparados porque no sabemos lo que nos puede deparar el virus. Por preparación y capacidad, ahí es donde estamos", zanjó.
Preguntada por si el Ejecutivo vasco ha identificado estructuras en las que se pueda confinar a enfermos asintomáticos, recordó que ya informó a Moncloa de los "espacios y alojamientos con unas condiciones adecuadas y que se han mantenido en la crisis asistencial y posterior".
"Nosotros recogemos la información y estamos en condiciones óptimas para hacer el seguimiento"
Consejera de Salud