Madrid - El bloqueo de las negociaciones para formar Gobierno en la Comunidad de Madrid tras las exigencias de Vox ha llevado al socialista Ángel Gabilondo a desempolvar su traje de candidato e impulsar de nuevo su investidura para presionar a C’s, que ahora más que nunca tiene la llave de la gobernabilidad.
El bloqueo ha ido a más tras la oferta de Vox para firmar con PP y Ciudadanos “un programa único” donde ha pedido incluir determinadas exigencias polémicas. Mientras que la candidata del PP, Isabel Díaz Ayuso, se ha mostrado dispuesta a negociar, el de Ciudadanos, Ignacio Aguado, ha sido tajante al asegurar que no va a haber un Gobierno en Madrid en esas condiciones.
Gabilondo ha aprovechado la tesitura para volverse a posicionar como candidato y presionar a Ciudadanos, al que ha invitado a negociar un acuerdo de investidura para conseguir la tan ansiada regeneración en la Comunidad de Madrid. El socialista es consciente de que su propuesta tiene muy pocas posibilidades de prosperar, ya que Ciudadanos ha dejado claro su veto al PSOE desde antes incluso de la campaña electoral. De hecho, tras la oferta de Gabilondo el propio Aguado recalcó que no tiene “interés ni intención” de que gobierne la izquierda en Madrid. Con todo, Gabilondo mantiene su tira y afloja con Ciudadanos y asegura que es la única alternativa viable para presidir la Comunidad de Madrid “salvo que se quiera incluir a Vox” y los números le dan la razón, al menos en parte. El 11 de julio es la fecha tope para la celebración del pleno de investidura. El presidente de la Asamblea, Juan Trinidad, de Ciudadanos, empieza hoy la ronda de contactos para proponer un nombre. Para que salga adelante la investidura de un candidato es necesaria la mayoría absoluta en la primera votación y, de no conseguirlo, mayoría simple en la segunda, es decir, más votos a favor que en contra. Los diputados de PP (30), Ciudadanos (26) y Vox (12) suman mayoría absoluta con 68 escaños frente a los 64 que aglutinan el PSOE (37), Más Madrid (20) y Podemos (7). Los grupos parlamentarios tienen dos meses para conseguir un acuerdo. Si no lo logran, el 11 de septiembre habría que repetir las elecciones autonómicas. - S. Carreras