madrid - Pedro Sánchez insiste en rechazar un Gobierno de coalición con Unidas Podemos, descartando que pueda incluir a ministros de la fuerza morada en el próximo Ejecutivo español y ofreciendo al partido de Pablo Iglesias segundos puestos, cargos intermedios cuyos responsables serán elegidos por la propia marca de los círculos. Fue la vicepresidenta española en funciones, Carmen Calvo, quien por vez primera expuso con claridad que los socialistas no están dispuestos a que haya miembros de Podemos en el Consejo de Ministros pero sí que se abren a otorgarles “responsabilidades político administrativas importantes para hacer una labor de carácter político importante”. Además, justificó la negativa a un Ejecutivo conjunto en que “la distancia electoral entre nosotros y el resto es muy grande, de manera que la alternativa es clara: o construyes o destruyes”.
Su posicionamiento no tardó en ser replicado por Irene Montero, quien confía en que Sánchez no acabe defraudando a la mayoría social que quiere “un gobierno conjunto” y sabedora de que durante la negociación habrá “muchas presiones y ruido”. A su juicio, si bien el primer objetivo es alcanzar un acuerdo programático, la negociación es “conjunta” y entra también en ella discutir sobre los equipos que darán “garantías” para que lo firmado se cumpla.
Calvo reseñó que la propuesta de Sánchez se ha lanzado a la organización morada, que será “quien deba decidir” en un escenario donde “es importante tener una base de trabajo con estabilidad”, pero “aquí no ocurre como en Valencia”, diferenció la dirigente socialista, al no sumar mayoría absoluta entre las dos formaciones. Así que “tendremos que seguir trabajando” para sacar adelante la investidura aunque se logre cerrar un consenso con Iglesias. Por su parte, Montero espera que ni el PSOE ni Sánchez “decepcionen y traicionen el espíritu del acuerdo que lleve a un gobierno estable y progresista”, y no cree que lleguen a la investidura sin los apoyos necesarios porque “no sería serio” ir “sin los deberes hechos”. En el mismo sentido se pronunció el ex secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, aguardando a que Sánchez no traicione toda esa ilusión y confianza que la gente depositó en un gobierno de progreso. - I. Santamaría