madrid - El “no es no” acuñado por Pedro Sánchez le ha llegado de vuelta cual bumerán, esta vez enarbolado por el PP, que ha asegurado que no solo no facilitará su investidura como presidente español, sino que pondrá todas las zancadillas posibles a la misma. “No solo no la vamos a facilitar sino que la vamos a dificultar”, aseguró tajante el secretario general de los populares, Teodoro García Egea, quien rechazó que sean un “partido bisagra”.

El número dos de la formación que preside Pablo Casado se pronunció en estos términos después de que Isabel Díaz Ayuso, candidata del PP a presidir la Comunidad de Madrid, se mostrara a primera hora partidaria de la abstención en la sesión de investidura, con el fin de que Sánchez no dependa de los independentistas catalanes ni de Bildu. Se hacía así eco de la afirmación realizada en el mismo sentido por la expresidenta madrileña, Esperanza Aguirre, el sábado en La Sexta. Sin embargo el PP, cuyo comité de dirección se reunió ayer en Génova, cortó de raíz esta posibilidad.

En una rueda de prensa, Teodoro García Egea aseguró que “a toda España le gustaría que Sánchez no gobernase con los nacionalistas, pero es la única opción que tiene o bien irnos a elecciones”. Afirmó por ello que “la pelota no está en el tejado del PP, sino en el de Sánchez”, a quien reclamó que se centre en conseguir los apoyos para su investidura. Explicó que van a “dificultar” la investidura porque “cuanto más cómodo esté Sánchez, más incómodos” estarán los españoles, y concluyó que el PP es el partido “líder de la oposición” que es “alternativa de Gobierno”, de forma que “cuando el PSOE pierda las elecciones, tomará las riendas del país”. - C. C. B.