BILBAO - El preso de ETA Gorka Fraile, cuyo alejamiento avaló el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) el pasado 28 de mayo, disfrutó de un permiso de tres días fuera de la prisión de El Dueso de Cantabria, según informó Etxerat. Se trata de la primera vez que a un recluso de la organización se le concede un beneficio de estas características estando en segundo grado.
Sin embargo, este hecho no tiene por qué suponer un vía para la cuarentena de presos de la organización que están en segundo grado, ya que el caso de Fraile tiene sus particularidades, al haber sufrido una grave enfermedad y haber dado pasos en el reconocimiento del daño causado.
El caso de Fraile volvió a la palestra el pasado mes de mayo, cuando la corte de Estrasburgo desestimó su recurso en el que solicitaba un cambio de centro penitenciario para estar más cerca de su familia. El TEDH consideró que el preso de la banda ha podido mantener un contacto regular con su familia y que estaba justificada la decisión de las autoridades españolas de mantenerlo en la prisión Badajoz para asegurar la disciplina en las prisiones, evitar sus vínculos con la organización terrorista y para respetar la dignidad de las víctimas.
De cualquier manera, Fraile -que cumple una pena de 25 años de prisión- fue finalmente traslado el pasado año a la prisión cántabra de El Dueso. - DNA
