Bilbao - En un Aberri Eguna mediatizado por dos campañas electorales, Iñigo Urkullu propuso “unos minutos de reflexión constructiva” como dique de contención al ruido dialéctico que viene de Madrid. El lehendakari llamó ayer en Bilbao a “volver a la esencia” para seguir construyendo una “nación vasca de valores”. En un discurso que glosó las seis claves para edificar la Euskadi del siglo XXI, Urkullu abogó por modelo del PNV ante las estrategias del “maximalistas, negacionistas y retrasistas”.
Empleo, innovación, solidaridad, convivencia autogobierno y auzolan fueron los ejes expuestos por Urkullu, que defendió que “ser patriota, defender y promover Euskadi es trabajar cada día para ampliar y profundizar nuestro autogobierno reconocido”. Ese autogobierno equivale a “más progreso, bienestar y calidad de vida”. En resumen, “más Euskadi”, proclamó el lehendakari, que advirtió de la tempestas política que se pueden cernir sobra Euskadi si los jeltzales no erigan un equipo fuerte en Madrid.
“Tenemos alrededor tras estrategias”, aseveró. Por un lado, están los maximalistas, o “el todo o nada que se queda siempre en nada”. Están los negacionistas, “una amenaza ahora triplicada” que “no reconocen nuestra realidad nacional y pretenden arrebatarnos lo construido”. Por último, el lehendakari advirtió de los “retrasistas”, que “miran a Euskadi solo si necesitan gobernar”. “Hay una alternativa, es el PNV”, concluyó. - I.F.
