bilbao - La ley vasca que busca reparar los abusos policiales sufridos entre 1978 y 1999 ha sido aprobada en el Parlamento Vasco, y el Gobierno cree que está todo listo para echar a rodar el procedimiento. Aún pende sobre esta ley la amenaza de un recurso del PP ante el Tribunal Constitucional, pero solo el Gobierno español tiene capacidad para congelar automáticamente la puesta en marcha de la norma con el mero acto de interponer un recurso. Por ello, el Gobierno Vasco cree que puede ir dando pasos y va a trabajar en la puesta en marcha del reglamento de desarrollo de esta ley, que es el paso previo a que la comisión de expertos empiece a valorar los casos. Una vez aprobado ese reglamento, se abrirá un plazo de presentación de solicitudes para las víctimas, y la comisión de expertos, de la que forma parte el forense Paco Etxeberria, comenzará a analizar y resolver cada caso. Las fuentes consultadas por este periódico aseguran que no parece posible que la comisión pueda empezar a resolver las solicitudes antes del verano.
Los recursos que sobrevuelan sobre esta ley y sobre la navarra no preocupan demasiado al Gobierno vasco o, al menos, no están alterando sus planes. La ley que se ha aprobado en el Parlamento es una reforma de la activada en 2016, y el contenido de esas modificaciones fue pactado con el presidente Sánchez para dejar doblemente claro que no se pretende invadir las competencias de los jueces, establecer culpables o esclarecer hechos. Se trata de un proceso administrativo de reconocimiento de las víctimas y de reparación de su dolor. A cambio de introducir con mayor claridad aún esos preceptos, Sánchez retiró el recurso que interpuso Rajoy. En la ley se asegura la protección de los datos de las fuerzas de seguridad estatales. No obstante, sindicatos como el SUP mantienen su marcaje alegando un daño reputacional a los cuerpos policiales. Sin embargo, solo tienen capacidad de recurrir ante la justicia ordinaria, y ya recibieron un varapalo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.
Por otro lado, el lehendakari presidirá hoy en Bilbao un acto en memoria del taxista Fermín Monasterio en el cincuenta aniversario de su asesinato por parte de ETA. El Gobierno Vasco tiene intención de impulsar homenajes individuales como este en lo sucesivo, cuando las familias así lo deseen y sean fechas simbólicas. Una amplia delegación del Gobierno Vasco y el secretario de Convivencia, Jonan Fernández, acudirán al Parque de Doña Casilda. - M. Vázquez