BARCELONA - En plena polémica creciente por la colocación y retirada de lazos amarillos en las calles de Catalunya, el conseller d’Ensenyament, Josep Bargalló, ha censurado “el nivel de falsedades e injurias que hacen circular” los dirigentes de Ciudadanos “y sus medios afines llegando ya a niveles insospechados”. La última tiene como protagonista a una mujer que presuntamente había sufrido una fractura en la nariz por retirar estos lazos en las en las proximidades de la Ciutadella en Barcelona, algo que los propios Mossos han aclarado que no ocurrió por una motivación política. Según adelantó La Vanguardia, citando a fuentes de la Policía catalana, la agresión se produjo después de la fuerte discusión entre un vecino de Ciutat Vella que paseaba a su madre en silla de ruedas y la mujer. Según los agentes que intervinieron en los hechos el hombre habría reñido, de muy malas maneras, a los hijos de la víctima porque jugaban a arrancar lazos y tirarlos por el suelo. A los tres menores les recriminó que “ensuciaran la ciudad”. Cuando la madre defendió a sus hijos, el agresor le gritó que se marchara a su país -es rusa nacionalizada española- y le dio un fuerte puñetazo en la cara. Todo ello sin ninguna alusión política respecto de los lazos amarillos, los presos políticos o el independentismo. Según la explicación de los Mossos el motivo de la discusión no tuvo nada que ver con la política.

Tanto desde el partido de Albert Rivera como del PP y desde las entidades como Sociedad Civil Catalana se acusó al independentismo de estar detrás de este ataque. De hecho, la líder de C’s en Catalunya, Inés Arrimadas, anunció que este próximo miércoles convocará una manifestación “en apoyo a la víctima y en repulsa a estos hechos” y ayer mismo, tras publicarse los detalles sobre el suceso, avanzó que presentará una denuncia a la Fiscalía para que se investigue si ha podido existir un delito de odio. El PP aseguró que abrirá una oficina de asesoramiento a todas las personas “denunciadas, sancionadas o agredidas por retirar lazos amarillos”.

Por su parte, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pidió “prudencia antes de hacer interpretaciones partidistas que solo generan confusión y crispación”, mientras que el conseller d’Ensenyament, Josep Bargalló, censuró en Twitter “el nivel de falsedades e injurias que hacen circular C’s y sus medios afines”, después de condenar sin matices la agresión. - I. Santamaría