madrid - Ciudadanos volvió a demostrar ayer los problemas de relato que le genera participar en una maniobra de demolición de Cristina Cifuentes que suponga aliarse con la izquierda en contra del PP. El partido naranja sigue sin dar el paso de apoyar la moción de censura del PSOE y Podemos, que suman 64 votos en la Asamblea de Madrid frente a los 65 de PP y Ciudadanos, todavía socio parlamentario de la presidenta. La formación de Albert Rivera no quiere perder respaldos electorales en la disputa que mantiene con el PP por el electorado conservador, pero al mismo tiempo es consciente de que los argumentos se le agotan, porque había condicionado cualquier decisión a que la universidad se explicase y ya lo ha hecho. Ayer planteó una vía intermedia que supondría un ataque de baja intensidad al PP para cuidar su electorado de centro-derecha: sugirió que Cifuentes podría dimitir y dar paso a otro candidato de las filas populares. Se trataría de repetir la misma maniobra que hizo caer al presidente murciano Pedro Antonio Sánchez.

El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, admitió en una rueda de prensa celebrada ayer que otro aspirante del PP sería una “opción”. Volvió a mostrar sus recelos ante la moción de censura y dijo que “lo importante no es el cambio de sillas, sino conocer la verdad”. “Hay opciones previas a apoyar al PSOE y a Podemos en una moción de censura”, dijo. En ese sentido, admitió que una “opción” sería apoyar a otro candidato del propio PP. No obstante, siguió aferrándose a su propuesta de comisión de investigación. “Estaría bien demostrar qué presiones hubo por parte de un cargo público para obtener un trato de favor si las hubo, demostrar las conexiones entre los intereses de un cargo público y las irregularidades...”, dijo.

Hasta el momento, los esfuerzos del partido naranja se están centrando en ganar tiempo y, si acaso, vestir con todos los argumentos posibles su participación en una eventual moción de censura. Pide primero una comisión de investigación exprés que pueda saldarse en dos semanas y que disminuya el coste electoral que tendría entre el votante conservador su hipotética decisión de hacer caer a Cifuentes. El secretario general del partido, Albert Rivera, pidió ayer a los socialistas que, antes de la moción, apoyen “inmediatamente” la comisión de investigación. Según dijo, Podemos también le ha dado el visto bueno. “De aquí a dos semanas se podría tener el tema resuelto y saber qué personas han estado implicadas”, argumentó. Según dijo, “todas las puertas estarán abiertas a una petición de dimisión, cambio de gobierno o moción de censura”, pero primero debe “descubrirse la verdad”. También aludió a la investigación de la Fiscalía.

el psoe rechaza la comisión Los prolegómenos que está planteando Ciudadanos le podrían permitir llegar a las puertas de las elecciones que tendrán lugar dentro de un año con Cifuentes aún en el cargo y debilitada, un escenario más favorable para sus intereses que colocar ahora a un nuevo aspirante que podría revitalizar al PP. Voces del partido pidieron también la imputación de Cifuentes como condición. En paralelo, el grupo de Ciudadanos en la Asamblea regional ha enviado una carta formal a Podemos y PSOE para que apoyen la comisión. No obstante, el portavoz del PSOE-M, Ángel Gabilondo, consideró ayer “insuficiente” la creación de este foro parlamentario “en la actual coyuntura”, y apostó directamente por “abrir un espacio y un tiempo diferente” en la comunidad con una moción de censura.