BILBAO - Andoni Ortuzar consideró ayer que ahora que los miembros de ETA “están a punto de bajar definitivamente la persiana, sería bueno que asumieran con claridad su trágico legado y la injusticia de sus actos”. En su intervención en el Aberri Eguna, el presidente del EBB del PNV argumentó que “ahora que ETA está a punto de desaparecer para siempre de nuestras vidas, la sociedad quiere y debe cerrar las heridas del pasado para poder aspirar a un porvenir en paz y libertad. Espero que este sea el último Aberri Eguna en el que tengamos que hacer referencia a ETA”.

Ortuzar recordó que “a lo largo de toda nuestra historia hemos estado radicalmente opuestos a la violencia de ETA. También por razones políticas, pero sobre todo por motivos éticos. Se puede morir por una idea, pero nunca matar por ella”. “La violencia de ETA, además de muerte, dolor y desolación, provocó una crisis moral en nuestra sociedad, y ha ensuciado el nombre de Euskadi y de la causa vasca durante décadas al juntarse con una sigla que aterrorizaba aquí y fuera de aquí en nombre del pueblo vasco”, añadió.

Por su parte, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, está convencido de que “haga lo que haga ETA, el relato de lo ocurrido en España no da lugar a alternativas” y de que “las víctimas del terrorismo tienen derecho a que se les respete y derecho a que defendamos que jamás puedan ser humilladas”. “En este asunto no caben equidistancias ni eufemismos, los asesinos son los que asesinan y las víctimas quienes son asesinadas, y a todas ellas hay que garantizarles memoria, dignidad, justicia y verdad”, afirmó el ministro en un comunicado.

Además de la nota de Interior, el titular de esta cartera escribió un tuit en el que asegura que “es una prioridad de @interiorgob que las víctimas del #terrorismo se sitúen en el centro del relato para que las generaciones venideras sepan la verdad de lo que pasó”, y por eso -dice- “hemos incluido unidades didácticas en la ESO”.

Por otro lado, el colectivo de víctimas Covite urgió al Gobierno español a “disolver de una vez por todas lo que queda de ETA y a frenar cualquier tipo de acto público o de panfleto radical que sirva para blanquear su historia criminal y para agradecer a sus miembros haber asesinado”. - M. Aizpuru