barcelona - Andreu tiene 23 años, estudia Filosofía y puede ser uno de los miles protagonistas del efecto Puigdemont. Catalanista y de izquierdas, no ve claro votar a ERC. Considera, como JxCat, que el 21-D va en primer lugar de restituir al Govern. Asegura que hoy no se vota un Parlament, sino la dignidad del país. Esta coordenada explica la denominación popular de la plancha: Llista del President.

Andreu no ve en Puigdemont la imagen de clásico convergent, lo que por otro lado ahuyenta de la urna al tradicional burgués catalanista, ni tiene el historial de algunos de ellos. La cartelería, la banda sonora de Sopa de Cabra y los últimos movimientos del president cesado le permiten mantener viva la idea de restituir la Generalitat. Parte del electorado aprecia su proyeción y recela de la posibilidad de cambiar al líder. Pese a que pueda ser encarcelado si regresa. Un precedente: en las negociaciones de 2015, la CUP cortó la cabeza de Artur Mas.

Última razón de Andreu. Las últimas semanas de los aspirantes independentistas no le convencen. Con Junqueras encarcelado, ERC no acierta. Marta Rovira fue la elegida, pero no terminó de llegar. Carles Mundó podría relevarla, pero como ocurre con la opción CUP, un nuevo president no es restituir al Govern. ‘Solo’ es ganar a los constitucionalistas y elegir al president 131. Lo que JxCAT cree que supone avalar a Rajoy. - J. A.