madrid - Los sindicatos de la Policía Nacional aseguraron ayer que el dispositivo de seguridad de cara al 1-O ha sido diseñado para hacer frente “al desafío secesionista”, por lo que no permitirán que “se imponga el acoso o la coacción” y garantizarán la legalidad: “No estamos aquí para perseguir ideas, urnas o papeletas”, precisaron. Los cinco sindicatos mayoritarios de la Policía -SUP, CEP, UPF, SPP y ASPC-, que representan al 90% de los agentes de este cuerpo, consensuaron un comunicado sobre su actuación en el referéndum.
Las centrales aseveran que la consulta suspendida por el Tribunal Constitucional es consecuencia de la “irresponsabilidad de los partidos nacionalistas, que nos ha colocado en una situación socialmente tensa”. En una rueda de prensa posterior a la lectura del comunicado, explicaron que el dispositivo de seguridad se basa en el principio “disuasorio”, aunque en último término podría ser de “acción”, siguiendo criterios de “proporcionalidad y congruencia”.
Los representantes sindicales argumentaron que “el imperio de la ley, el sometimiento de las autoridades públicas con ejemplaridad a ella y el respeto a las normas que ordenan la convivencia son pilares quebrados en Catalunya con un proyecto político al margen de los cauces legales”. En este sentido, agregaron que “por este motivo, y no por otro”, la Policía Nacional se encuentra en Catalunya: “No para perseguir ideas, urnas o papeletas, como afirman determinados líderes políticos”.
Además, expresaron su convicción de que los Mossos d’Esquadra “no se van a apartar ni un milímetro de la legalidad y de las órdenes judiciales” que reciban, y reclamaron a los responsables políticos de la Policía catalana que “cesen las presiones a determinados mandos”. Aseguraron que la “seguridad del Estado no se va a ver mermada” por el amplio despliegue de agentes en Catalunya y admitieron que el referéndum del domingo puede provocar la llegada de grupos de diferente ideología con intenciones “violentas”. - Efe