BARCELONA - El conseller de Interior de la Generalitat, Joaquim Forn, lamentó ayer que el objetivo del Gobierno español al enviar efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil tan solo es el de “alterar el orden” para que “el 1-O haya una reacción” entre la ciudadanía catalana, que hasta la fecha ha protagonizada masivas movilizaciones pacíficas. El conseller apuntó que “nadie le ha informado” sobre la cifra exacta de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del estado desplazadas a Catalunya, a la par que calificó de “inaceptable” las imágenes vividas con “la salida de furgonetas de policías, que parece que vayan a la guerra”.
Frente a esa imagen ofrecida por la Guardia Civil y la Policía Nacional, Forn llamó a la ciudadanía a no caer en “provocaciones” en el transcurso del 1-O. Instó a los ciudadanos a que “no caigan en su trampa” y se manifiesten “de forma cívica”. El conseller, del mismo modo, censuró la petición de la Fiscalía Superior de Catalunya a los Mossos d’Esquadra de precintar los colegios electorales. Se trata de una “aberración” de un órgano que “se está excediendo en sus competencias” para pasar a actuar “como la policía”.
El Govern está “muy preocupado” por el papel de la Fiscalía, que “va en contra del sentido común y cualquier legalidad”. Como máximo mandatario de la policía catalana, Forn expuso el “malestar” reinante en el cuerpo pro la orden del ministerio Público, que solo busca “poner a los Mossos “en contra de la población”. - E.P.